De acuerdo con el fiscal del Estado, Gerardo Octavio Solís, no hay información que apunte a que el asesinato de Carlos Alejandro Delgadillo Romero y posterior levantón de Jessy Pacheco (ambos recién egresados de la carrera de Medicina de la Universidad Autónoma de Guadalajara), se haya debido a represalias por alguna riña ocurrida dentro del bar donde se encontraban, o que los agresores se hubieran encontrado al interior del mismo de manera previa."No existe hasta ahora alguna declaración o datos ciertos de que se haya suscitado alguna riña previa, sino que al momento de que salen los jóvenes, Carlos Alejandro es abordado por un grupo de sujetos quien de inmediato empiezan a golpearlo para posteriormente hacerle los disparos (...) De lo que se advierte este momento es que la agresión y la manera en la que fue levantado el joven, todo se desenvuelve en la parte de afuera", dijo.El fiscal indicó que las investigaciones iniciaron a partir del homicidio de Carlos Delgadillo, ocurrido la madrugada del domingo en el cruce de Pablo Neruda y Terranova, en la colonia Providencia, donde se encuentra el bar al que habían acudido previamente, sin embargo, en ese momento no hubo declaraciones sobre la privación de la libertad de Jessy, sino hacia el transcurso del domingo, cuando fue presentada una denuncia por su desaparición.Tras el cruce de información, explicó Solís, se supo que Jessy acompañaba a Carlos cuando ocurrieron los hechos, y que de acuerdo con los indicios, fue levantado por los mismos hombres que realizaron el ataque mientras ambos esperaban un taxi ejecutivo para regresar a casa, según señalaron las primeras versiones. Además, dijo, los dos jóvenes eran acompañados por dos mujeres de las que hasta ahora no se tiene información.Solís señaló también que hasta el momento han declarado nueve personas, entre ellas varios trabajadores del establecimiento, quienes indicaron que los jóvenes frecuentaban el lugar y que incluso tenían comunicación con algunos de los empleados, según indicó Solís, aún falta por recibir las declaraciones del resto de trabajadores, que ronda en las 100 personas y que, conforme avancen las investigaciones, se podrá brindar más datos sobre lo ocurrido.Añadió que tras lo ocurrido fue realizado un cateo dentro del bar, gracias al cual se localizaron píldoras y mariguana escondidos en un sitio cercano a los baños, por lo cual el lugar continúa asegurado con la finalidad de "preservar evidencias".El fiscal señaló que el cuerpo de Carlos Delgadillo ya fue entregado a sus familiares, luego de que una tía del joven lo identificara tras su autopsia, sin embargo, hasta el momento no hay información sobre el paradero de Jessy. Al respecto dijo, que la Fiscalía ya se encuentra en comunicación con el Consulado Americano, con el objetivo de compartir información desde ambas dependencias y localizar al joven lo antes posible.LS
