“Ni en las zonas de mayor prestigio en Jalisco estamos seguros, en este país en ningún lugar estamos seguros”, lamentó Héctor Vargas, gerente de La Pastería, un negocio de cortes y vino sobre la avenida Providencia, que se encuentra tan sÓlo a unos metros del epicentro de la última balacera en la ciudad Guadalajara.Héctor relató que, al ras de las 18:00 horas del pasado viernes, se escucharon los primeros disparos, por lo que acto seguido él, su personal y los comensales en el lugar se tiraron al piso a la espera de que ninguna de las balas terminara en su restaurante.“Fue un pánico total, sonaron los disparos y ya como fuera instinto nos echamos todos al piso, comienzo a buscar a mis meseros, ver que todos estén bien, mientras los clientes ya estaban todos debajo de las mesas, nadie sin saber qué hacer y con todo el miedo de no saber qué era lo que estaba pasando”, apuntó.Mientras que, justo en frente del restaurante donde se suscitó la balacera, el capitán de meseros de Pizzas La Leña tomaba decisiones al vapor para mantener a sus clientes y empleados a salvo.Roberto Vera afirmó que al escuchar las primeras detonaciones, su instinto le dijo que tenía que cerrar cortinas, “nadie sabía que era lo que pasaba, pero por los gritos y el movimiento vimos que era aquí en frente, entonces inmediatamente reaccioné y casi que brinqué para bajar la cortina”.“Los primeros minutos fueron de terror, porque nadie sabíamos nada, si eran narcos, si eran policías, si había un enfrentamiento armado a unos metros de nosotros y si eso significaba que ya ahí nos íbamos a quedar”, refirió.Después de los primeros 10 minutos, poco a poco trabajadores y comensales se fueron levantando del suelo, los comercios permanecieron cerrados hasta la mañana de este sábado, cuando poco a poco la vida se va recobrando en Providencia.“La verdad yo no pienso que sea inseguro estar aquí, inseguro es en todos lados, pero sí quisiera que hubiera mayor seguridad de alguna manera, que nadie ande armado o que no los dejen pasar con armas a ningún lugar, porque sí fue saldo blanco para nosotros, pero mataron a tres a 10 metros de donde yo trabajamos todos los días”, comentó.La tarde de este viernes 21 de octubre, tres personas fueron asesinadas a balazos al interior de un restaurante en la avenida Providencia en su cruce con la calle Terranova, además de otros cuatro sujetos que resaltaron heridos tras la agresión.El fiscal de Jalisco, Luis Joaquín Méndez, confirmó más tarde que uno de los fallecidos era Salvador Llamas Urbina, director del Sistema de Agua de Puerto Vallarta y coordinador del gabinete del alcalde Luis Michel.De forma preliminar, entre los otros dos fallecidos estaría Fernando Muñoz Ortega, excomisario de Seguridad Pública de Vallarta (se indaga si el otro muerto era el agresor). Sobre los lesionados, se presume que también son escoltas.JM
