Un grupo de ayuda humanitaria denunció que algunos agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos pusieron en peligro las vidas de migrantes que cruzan la frontera ilegalmente al vaciar botellas de agua que la organización dejó en un campamento desértico con la idea de auxiliar a esos viajeros.El grupo No More Deaths (No más muertes) hizo la denuncia el miércoles y proporcionó videos de los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus iniciales en inglés) acuchillando las botellas y tirando el agua al suelo.Un portavoz de la CBP contestó que la agencia no aprueba tales acciones y que investigarán los informes de conducta inapropiada por parte de sus elementos. El vocero, sin embargo, no dijo específicamente si los agentes mostrados en los videos de No More Deaths serían investigados."Los agentes de la Patrulla Fronteriza han recibido instrucciones de nuestros mandos para que no alteren la ayuda humanitaria", insistió el agente Christopher Sullivan, portavoz de la agencia para el sector de Tucson."La CBP está comprometida a hacer cumplir las leyes federales para proteger las fronteras de nuestra nación y garantizar la seguridad de todos los individuos", agregó.La portavoz de No More Deaths dijo Mary Ada Vallet respondió: "Si eso es cierto, esa directiva debería hacerse pública y debería cumplirse".El grupo reavivó sus acusaciones contra la agencia fronteriza el miércoles, durante una conferencia de prensa cerca de la frontera entre Arizona y México.La organización dio a los medios de comunicación una serie de videos tomados entre 2010 y 2017, en su mayoría con cámaras activadas por movimiento en su campamento del desierto. Uno de los videos, de un agente masculino tirando agua al suelo de una caja de plástico fue grabado por un voluntario de No More Deaths, dijo Vallet. Dijo que otro video, donde se ve a una agente mujer pateando un recipiente de plástico fue tomado por una cámara activada por movimiento.Un abogado en Tucson de la Unión Americana de Libertades Civiles, Billy Peard, dijo que la patrulla fronteriza está muy bien informada sobre investigaciones internas. Agregó que no cree que nadie haya sido despedido o sancionado por dañar la ayuda humanitaria.John Fife, uno de los fundadores de No More Deaths, dijo que el grupo y la Patrulla Fronteriza llegaron a un acuerdo en 2014 según el cual las autoridades no alterarían la ayuda humanitaria que la organización deja en su campamento del desierto, mayormente recipientes de agua y suministros médicos.Fife fue un ministro presbiteriano quien estuvo activo en el movimiento santuario, que proporcionó refugio a los centroamericanos que huían de la guerra civil en la década de 1980.Sin embargo, dijo que el pacto se vino abajo el verano pasado cuando la agencia allanó el campamento mientras voluntarios proporcionaban ayuda médica a cuatro migrantes. Los agentes arrestaron a los hombres, que habían entrado ilegalmente a Estados Unidos.Aunque la gente entre ilegalmente al país, "hay normas internacionales que deben ser respetadas cuando se trata de derechos humanos y ayuda humanitaria", agregó Fide.LS