Los fieles seguidores cuatroteístas olvidaron ayer momentáneamente su desprecio por los “racistas y clasistas” conservadores que no apoyan sus reformas y critican al Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, al igual que los detractores de la 4T dejaron por un rato de lado los agravios lanzados desde el púlpito presidencial y de los “chairos”.En un país que se polariza cotidianamente desde las mañaneras en Palacio Nacional enfrentando a los fifís y aspiracionistas contra el pueblo bueno y pobre, ayer la Selección nacional de futbol no pudo hacer el milagro de golear tres cero al seleccionado de Arabia Saudita, pero sí unir a tirios y troyanos en contra del entrenador argentino del Tri, Gerardo el “Tata” Martino, que se convirtió en el villano favorito.Poco importó que ayer el seleccionado mexicano haya jugado su mejor partido y haya estado cerca de lograr la hazaña. Eso en vez de paliar las inconformidades por una eliminatoria mediocre, por la exclusión inexplicable de jugadores no convocados y por el empate con Polonia y la derrota con Argentina, las intensificaron con la ilusión frustrada que provocaron con el rendimiento explosivo que tuvieron en el segundo tiempo y que no alcanzó para superar la ronda de grupos, y lejos del tan esperado quinto partido. El Tri cerró ayer así una de sus peores actuaciones en la historia de los mundiales, al no pasar siquiera al cuarto partido como se había logrado en las últimas competiciones.Desafortunadamente, la coincidencia de crucificar al Tata será fugaz y la polarización social en México regresará corregida y aumentada en distintos frentes por el irritado humor social por lo poco que duró el Tri como distractor en Qatar.En el ámbito nacional está el desenlace en el Congreso de la reforma electoral que se pospuso el martes para la próxima semana luego de que el Presidente y Morena no consiguieron los votos necesarios para su aprobación y preparan su “Plan B”. Seguro el escenario ideal para la 4T hubiera sido tener a la mayoría de las y los mexicanos pendientes del partido no logrado contra Francia y esperanzados en el quinto partido. En el ámbito local, habrá que regresar a las reminiscencias del conflicto entre el Gobierno del Estado y la Universidad de Guadalajara, que luego de la marcha alfarista contra la FIL provocó, paradójicamente, un fuerte encontronazo interno entre los dos principales competidores por la candidatura a la gubernatura por el partido Movimiento Ciudadano, el alcalde tapatío Pablo Lemus y el secretario de Asistencia Social, Alberto Esquer. Sin dejar de lado la nueva embestida que desde la mañanera hizo López Obrador a Raúl Padilla y a la FIL, y que lo alineó al sentimiento antiFil y antiPadilla del gobernador Enrique Alfaro. Los reflectores ya sin el Tri en Qatar también apuntarán con todo a estos y otros temas.jbarrera4r@gmail.com
