Dentro de toda la irritación social que trajo consigo el tarifazo de la semana pasada, cuando el Gobierno de Enrique Alfaro decidió aplicar el alza autorizada por la Comisión Tarifaria el año pasado y subir de siete a 9.50 pesos el precio del pasaje en el Tren Ligero, Macrobús y Sitren, y en una decena más de rutas del transporte público, también podría detonar una acción positiva que contribuya a la supervisión colectiva del manejo y la pretendida mejora de este servicio público de movilidad.Esta oportunidad se abrió el miércoles pasado, luego de que Jesús Medina, el dirigente de la Federación de Estudiantes Universitarios (organización estudiantil que fue duramente criticada en redes sociales por no manifestarse inmediatamente en contra del incremento), una semana después del anuncio del alza, demandó a las autoridades la instalación de una mesa de trabajo en la que junto con las organizaciones que integran el Observatorio Ciudadano de Movilidad y Transporte Público se revisara el caso. Si no había una respuesta del Gobierno estatal a esta petición hoy viernes, la FEU amagaba con convocar a los estudiantes de la Universidad de Guadalajara a marchas de protesta.Esa presión rindió efectos, y ese mismo día quedaron conjuradas las movilizaciones callejeras, porque Diego Monraz, el titular de la Secretaría de Transporte, y otros funcionarios vinculados al tema, atendieron el llamado y fijaron para la próxima semana el inicio de los diálogos para revisar tres puntos:1) ¿Qué pasó con los estudios de la tarifa social que, junto con los estudios técnicos y económicos, son los que deben determinar la tarifa del transporte público? Y es que desde agosto de 2018 que sesionó la Comisión Tarifaria y se anunció que la tarifa que arrojaban los análisis de costos de insumos era de 9.50 pesos, nunca se dio a conocer qué cifra daban los estudios para medir la situación económica de los usuarios. Si existe o no existe ese estudio actualizado será lo primero que se deberá aclarar.2) ¿En qué va el tema de los transbordos gratuitos? A casi una semana de que entró en vigor el tarifazo en el Tren Ligero, Macrobús y Sitren, y las rutas de transporte que ya cobran 9.50 pesos, el punto será definir cómo se puede mitigar el impacto a la economía de los usuarios con un buen sistema de transbordos hasta hoy inexistente, y3) ¿Qué tanto han mejorado el servicio las rutas que pasaron del caduco y criminal modelo del hombre-camión al de ruta-empresa para validar que cobren 9.50 pesos? Si el primer sistema de transporte en tener el beneficio del aumento generalizado fue el Tren Ligero bajo el argumento oficial que no se le había dado el mantenimiento debido, habrá que abrir sus finanzas al escutrinio social para conocer su situación actual y en qué se invertirá el casi millón y medio de pesos diarios que empezaron a ganar extras a partir del sábado que subieron su tarifa, sobre todo cuando se habla de un incremento considerable en su nómina.Estamos, pues, ante la oportunidad de lograr una auditoría social del transporte, que bien podría ser lo que nos ha faltado para hacer realidad la tan anhelada y no lograda modernizacion de este servicio público.jbarrera4r@gmail.com
