Jueves, 07 de Noviembre 2024

LO ÚLTIMO DE Ideas

Ideas |

América Latina bajo protesta

Por: Rubén Martín

América Latina bajo protesta

América Latina bajo protesta

Una oleada de protestas, rebeliones y movilizaciones masivas resuena en América Latina, en distintos paisajes. Haití, Ecuador, Chile, Panamá, Bolivia y ahora Colombia.
Aunque con matices distintos, la mayoría de las protestas sociales que se han registrado en apenas los dos últimos meses, tienen puntos en común.

El actual ciclo de protestas sociales comenzó en Haití desde el 15 de septiembre, cuando miles de haitianos salieron a manifestarse contra el aumento de las gasolinas, pero también contra la corrupción al descubrirse la desviación de tres mil 800 millones de dólares del fondo Petrocaribe. El Gobierno de Jovenel Moïse ha reprimido la protesta social causado al menos 77 muertos en lo que va del año, cientos de heridos y detenidos.

La protesta social apareció en Ecuador a partir del 3 de octubre, unos días después de hacerse público un acuerdo del presidente Lenin Moreno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que impactaría en los precios de los combustibles y en el sector público. Tras 10 días de intensas protestas y movilizaciones, el Gobierno echó para atrás el decreto que desató la ira popular. También hubo represión estatal con saldo de ocho muertos y más de mil 300 heridos.

En Chile, la rebelión popular más intensa y radical de este ciclo comenzó a mediados de octubre con un acto de rebeldía de chicas de secundaria. Al grito de “evadir, no pagar, otra forma de luchar” cientos de jovencitas se saltaron los torniquetes del Metro, en protesta por el aumento anunciado concitando la solidaridad de la mayoría de la sociedad. La primera gran manifestación se convocó el 18 de octubre y continuaba hasta ayer. Las protestas ya no son sólo por 30 pesos de aumento en la tarifa del metro, sino contra 30 años de gobiernos neoliberales que han producido una profunda desigualdad en la sociedad chilena. La represión de las fuerzas armadas heredadas de la dictadura de Augusto Pinochet se ha saldado con más de 20 muertos y dos mil heridos, de los cuales cerca de 300 han perdido uno o ambos ojos.

A fines de octubre y comienzos de noviembre, Panamá fue el escenario de las protestas en contra de cambios a la Constitución del país.

El siguiente escenario de las manifestaciones ha sido Bolivia. El conflicto político comenzó como protesta por el resultado de las elecciones del 20 de octubre que permitían a Evo Morales otro periodo presidencial. Aprovechando el movimiento, los militares dieron un golpe de Estado que ha sido cuestionado con amplias movilizaciones populares, especialmente de indígenas. La represión ha sido brutal y hasta ayer ha dejado 32 muertos y cientos de heridos.

En Colombia se convocó a un masivo paro nacional el pasado jueves que sacó a la calles a millones de colombianos, quienes protestan contra reformas para flexibilizar el mercado laboral y cambiar el sistema de pensiones, más dinero para las universidades y contra la represión de políticos a activistas y defensores del territorio.

El panorama conjunto en todos estos episodios de protesta es que decenas de millones de latinoamericanos están manifestándose con cacerolas o marchando por las calles contra todo lo que les enoja e indigna.

Aunque hay matices, se pueden encontrar elementos comunes: en todos se protesta en contra las políticas neoliberales y sus distintas adaptaciones (extractivismo, privatizaciones, aumento de precios, bajos salarios y pensiones, recortes a educación); contra la represión que desatan los gobiernos respaldados por las fuerzas armadas; y exigencia de una democracia auténtica, no simulada.

Otra característica común en la mayoría de las protestas es que no han sido convocadas por los partidos políticos, sino desde organizaciones y movimientos sociales. Es pronto para saber el resultado que tendrá este ciclo de protesta social en América Latina, pero en definitiva inclinaron el antagonismo social del lado de los de abajo, al tiempo que están transformando la subjetividad política de millones de personas. Al menos la conciencia de millones de latinoamericanos ya fue revolucionada políticamente.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones