Se trata, salvo la mejor opinión del lector amable, de una ironía trágica: en la misma fecha -ayer- en que el Consejo de Rectoras y Rectores de la Universidad de Guadalajara “denuncia(ba) la desaparición de tres jóvenes” aparentemente secuestrados por “un comando armado (que) invadió su hogar (en la Colonia San Andrés de Guadalajara, el viernes) y los privó de la libertad”, y exigía (ese fue el verbo utilizado) “la inmediata búsqueda y localización con vida” de los tres (EL INFORMADOR, V-10-21, p. 8-A), los medios electrónicos difundían la nota complementaria: “Los cuerpos de los jóvenes fueron hallados en bolsas plásticas, la mañana del domingo, en las inmediaciones de la comunidad ‘El Pueblito’, entre Zapopan y San Cristóbal de la Barranca”.-II-Ironía trágica, decíamos. Exigir -demandar imperiosamente algo a lo que se tiene derecho- implica la irrecusable obligación del aludido (en el caso, según indica reiterativamente el texto de referencia, “las autoridades”) a atender la demanda. Además, se solicitaba algo prácticamente imposible, según quedaría demostrado en seguida: la localización “con vida” de los jóvenes. Éstos, cuando se publicó el desplegado, casi seguramente ya habían sido sacrificados, sin que las susodichas “autoridades” ni los familiares de las víctimas informaran si hubo alguna comunicación previa de sus captores.Ni el secuestro ni el hallazgo sin vida de los cuerpos de Ana Karen, José Alberto y Luis Ángel Moreno González son hechos aislados. Episodios similares, en Jalisco, son “el pan nuestro de cada día”. En la entidad “hay 12 mil 105 personas que encontrar, desde el 2018 a la fecha, pero 3 mil 906 han desaparecido desde que comenzó esta administración” (“El Occidental” IV-08-21). Las estadísticas no precisan cuántas de esas personas desaparecieron y reaparecieron por su propia voluntad, cuántas fueron localizadas con vida o cuántas corresponden a los restos encontrados en las fosas clandestinas descubiertas en Jalisco y otros estados.-III-Alejandro Encinas, Subsecretario de Gobernación y Derechos Humanos, y Karla Quintana, titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, aseguraron (ibid.). que ambas dependencias realizan “un trabajo específico” orientado a “atacar el fenómeno de la trata de personas”, porque las desapariciones de mujeres ya representan el 24.8%, y el 55.65% de ellas (más de la mitad) están entre los 10 y 19 años de edad”.A la fecha, sin embargo, no se dispone del menor indicio de que, en efecto, se esté atacando ese fenómeno.Colofón: estamos en el limbo.jagelias@gmail.com
