Actualmente en cartelera, “Olé: El viaje de Ferdinand” narra la aventura de un toro de lidia y su apacible comportamiento. “Ferdinand”, el toro, es más propenso a oler las flores del campo y no a la agresividad que caracteriza a los de su raza. Destinada a los más pequeños de la casa, esta cinta animada fue dirigida por Carlos Saldanha, basada en el cuento infantil de Munro Leaf. Ubicada en una España pueblerina, la película se une a una larga lista de producciones que tienen a los toros como protagonistas. La presencia de las corridas de toros en el cine existe prácticamente desde los inicios, pues los hermanos Lumière filmaron en Sevilla escenas típicas de las fiestas tradicionales de la Semana Santa, coronadas por una corrida de toros en la cinta de los creadores del cine. Desde entonces, la tauromaquia ha sido un tema frecuente en el séptimo arte, con piezas memorables como “Hable con ella” (2002), de Pedro Almodóvar. El cineasta español contó un relato sobre la soledad de las personas: “Lidia”, la protagonista torera, cae en coma tras una severa cornada. La historia se desarrolla a propósito de esa incomunicación de las personas al estar postradas inconscientes, aisladas de ese “ruedo de la vida”. Fiel representante de la cultura española, Almodóvar ostenta en su filmografía la constante de los toros. Ya desde su auge en los ochentas lo demostró con “Matador”, una historia protagonizada por Antonio Banderas y Nacho Martínez. Este último encarna a un torero que sufre una cornada, tras la cual debe retirarse del ruedo. Al seguir con su labor docente en la tauromaquia, en el aula entrelazará una historia de perversión y crimen con uno de sus alumnos.Años después, otra española participaría en “Manolete” (2008), un largometraje con la tauromaquia como pretexto histórico. Fue Penélope Cruz quien actuó el papel de Lupe Sino, también actriz española y que fuera pareja de Manuel Laureano Rodríguez Sánchez, alias Manolete. Basada en la vida real del torero (encarnado por Adrien Brody), esta coproducción española y británica tuvo la dirección de Menno Meyjes.Con la tauromaquia como telón de fondo, “Matador” (2005) de Richard Shepard se sirve del doble sentido de la palabra “matador” para contarnos sobre la vida de un asesino a sueldo. El rodaje de esta producción fue hecho en la Ciudad de México, con las actuaciones de Pierce Brosnan y Greg Kinnear.Ya de otras épocas, pero dignas de mención, son las obras basadas en el libro “Sangre y arena”, del otrora best seller Vicente Blasco Ibáñez. El autor español noveló una tórrida historia que cuenta la formación de un matador sevillense y su viaje a Madrid, donde pena por un lío amoroso. El primero en dirigir una adaptación fue el propio Blasco Ibáñez, en 1917: el relato ha vuelto al cine en 1922, 1941 y 1989, y a la pantalla chica un par de veces en los años sesenta. Aunque hoy en día es menor la frecuencia con la que se estrenan filmes con las corridas de toros como tema principal o secundario, “El viaje de Ferdinand” nos recuerda que las historias relacionadas a la tauromaquia pueden conmover a chicos y grandes.En el doblaje de la película “Olé: El viaje de Ferdinand”, participaron los actores Héctor Gómez como “Cuatro, el erizo”, Daniel Sosa como “Dos, el erizo”, Alondra Hidalgo como “Una, la erizo”, Raúl Anaya como “Valiente”, Mariana Treviño como “Lupe la cabra” y el actor Idzi Dutkiewicz como “Ferdinand”.
