Sorprendido. El argentino Gabriel Caballero, técnico del FC Juárez, admitió que la forma en la que su equipo llegó a la Primera División del futbol mexicano, por vía reglamento, no fue la mejor, y reconoció que no faltaron a los estatutos de la Liga MX.Juárez, equipo que hasta hace tres días formaba parte de la Liga de Ascenso, aprovechó el reglamento de la Federación Mexicana de Futbol, para negociar con el club Lobos BUAP el lugar que tenía en Primera División y certificó la compra de la franquicia para ocupar este sitio.De tal forma, Juárez, sin haber ganado en lo deportivo su ascenso, participará a partir del torneo entrante en el máximo circuito mexicano, mientras el Lobos desaparecerá, algo que, por el reglamento de cambio de sedes de la Liga en México, es permitido.“No nos corresponde a nosotros como la parte deportiva de una liga, juzgar si se maneja bien o no el reglamento. Así está escrito y se acata, de ninguna manera se violaron los estatutos”, expuso Caballero.“Yo mismo me quedé sorprendido. Hasta ayer (martes) era técnico de un equipo del Ascenso y ahora tengo que empezar a planificar la competencia contra equipos más fuertes”, añadió Caballero.En la búsqueda de conformar una Liga de 20 equipos y tratando de que los inversionistas presenten finanzas saludables, la Liga MX permite cambio de sedes y dueño a pesar de que no tengan méritos deportivos.El Juárez se quedó varado en las Finales de la Liga de Ascenso y al no obtener los resultados favorables, decidieron pagar a Lobos por ocupar su sitio.Hace un año, Lobos, equipo que había descendido, pudo permanecer en Primera División al pagar seis millones de dólares, pero al negociar directamente con Juárez la compra del lugar en Primera, perdió sus activos entre los que se contaban únicamente ocho jugadores, pues el resto eran prestados.Juárez, al adquirir el sitio que tenía Lobos en Primera División, hereda el porcentaje que define el descenso por lo que la lucha que tendrán de entrada será priorizar la permanencia en la Primera División.
