Sebastian Vettel tenía el rostro enrojecido por la ira, tras ser despojado de una victoria que requería con urgencia en el Gran Premio de Canadá.“Obviamente estoy enojado. Se lo podrán imaginar”, dijo Vettel. “Hoy di todo lo que tenía y más”. Había largado desde el primer puesto y había cruzado la meta apenas delante de Hamilton.Pero Vettel recibió una sanción de cinco segundos por un incidente ocurrido cuando restaban poco más de 20 vueltas. Pese a que la bandera a cuadros se agitó al paso de Vettel por la meta, esa penalización dio a Hamilton, cinco veces monarca de la Fórmula Uno, su quinta victoria en las últimas siete carreras y la número 78 de su carrera.En cambio, Vettel se conformó con el segundo sitio. No ha ganado en 15 carreras, una racha inadmisible para la escudería más orgullosa de la categoría.Independientemente de si el castigo con tiempo fue justo o no, el hecho es que Vettel incurrió en un error fundamental.Su auto ingresó a una zona con césped, en momentos en que Hamilton lo presionaba. Luego, el Ferrari volvió a la pista, obligando a que el británico frenara de manera intempestiva para no estrellarse contra el alemán.Pero en medio del disgusto, Vettel tenía un argumento digno de considerar.Durante décadas, la Fórmula Uno se ganó su reputación por maniobras temerarias y a toda velocidad. Solía ser famosa por el dramatismo que éstas significaban.Ahora, se sanciona a Vettel por un regreso considerado inseguro a la pista.Vettel lanzó una crítica, más directa que velada, a la Federación Internacional del Autmóvil (FIA), el órgano rector de la F1, al considerar que el razonamiento para sancionarlo va en contra del espíritu del automovilismo.“Esto no está volviendo popular nuestro deporte. La gente quiere vernos en una carrera. Esto era una carrera. Simplemente es una vergüenza que tengamos estas decisiones cómicas”, dijo el alemán. “Yo sólo deseo ser lo mejor que pueda... pero en la época de los pilotos antiguos. Deberíamos ser capaces de decir lo que pensamos, pero no podemos. Estoy en desacuerdo con el lugar en que este deporte se encuentra ahora. No es el deporte del que me enamoré”.Vettel finalizó delante de su compañero de Ferrari, Charles Leclerc. Valtteri Bottas, el otro piloto de Mercedes, fue cuarto.En el campeonato de pilotos, Hamilton tiene una ventaja de 29 puntos sobre Bottas y 62 respecto de Vettel.Tras el castigo de cinco segundos que le arrebató a Sebastian Vettel la victoria en el Gran Premio de Canadá de ayer, la escudería Ferrari ha presentado su intención de apelar la sanción, que de ser favorable, revirtiría el resultado que colocó a Lewis Hamilton como triunfador en el Circuito Gilles Villeneuve.El incidente por el cual se sancionó a Vettel ocurrió en la vuelta 48 de la carrera, cuando el piloto alemán perdió el control del SF90 en la tercera curva, regresando a la pista en la cuarta curva tras haber salido del césped, pero conservando la punta.Los comisarios de carrera determinaron que el piloto de Ferrari regresó al trazado de forma insegura, forzando a Lewis Hamilton a salirse de pista. El piloto británico frenó para evitar una colisión.De acuerdo con los comisarios, el piloto alemán violó el Artículo 38.1 del reglamento y la sanción correspondiente era de cinco segundos.Ahora, Ferrari contará con 96 horas a partir de la presentación de la apelación para reunir pruebas y buscar se revierta el resultado.Tras descender de su vehículo, todavía con el casco puesto, Sebastian Vettel se dirigió al hospitality de Ferrari. Minutos después se abrió paso hacia la parrilla de premiación posterior a la carrera, donde movió de su posición el cartel de segundo lugar que estaba puesto donde debería haber estacionado su coche.Atónitos, los espectadores en Montreal presenciaron el momento en que Vettel, con ademanes teatrales, colocó el cartel con el número dos frente al Mercedes de Lewis Hamilton. Posteriormente, el piloto alemán tomó el cartel con el número uno y caminó hacia la posición donde tendría que estar su coche.En medio de una ola de aplausos, Vettel colocó con firmeza el cartel con el número uno en el sitio en el que debió de haber estacionado su Ferrari, en una clara muestra de su molestia por el resultado final del Gran Premio de Canadá. Posteriormente, el alemán se dirigió hacia el podio de premiación.El jalisciense Sergio Pérez lamentó la falta de ritmo de su coche en el Gran Premio de Canadá, por lo que se conformó con el decimosegundo lugar en el Gran Premio de Canadá.“Todo el fin de semana no fue genial para mí. El ritmo era bastante pobre, siempre estaba atascado en el tráfico, por lo que las temperaturas estaban al límite y no podíamos hacer mucho al respecto”, señaló Pérez, quien había partido desde el sitio 15.“No fue un buen día para mí, pero sí un buen día para el equipo, anotando dos puntos de Lance. Sabíamos que llegar a los puntos iba a ser complicado, así que optamos por diferentes estrategias para intentar maximizar las oportunidades”, finalizó.
