Suplementos | Chevrolet Camaro ZL1 Muy manejable Hecho para las pistas, este deportivo es tan amigable en su manejo que podría considerarse para uso diario Por: EL INFORMADOR 4 de agosto de 2012 - 01:48 hs Lleva 580 caballos bajo el cofre. Al exprimirlos se necesita mucha habilidad para divertirse con él. / GUADALAJARA, JALISCO (04/AGO/2012).- Fuimos hasta Grand Rapids, Michigan, para conducir el “coche sensación” del momento que la marca Chevrolet traerá a nuestro país. Así, a unas millas de esta ciudad del norte de Estados Unidos, nos recibió en la pista Gingerman Raceway, con un trazado pequeño pero retador para esta mole llamada Camaro ZL1, de 580 caballos de potencia y 556 libras-pie de torque. Antes de llegar a la pista, condujimos 60 millas con la versión ZL1 Convertible –versión que de momento no llegará a México– para ir “calentando motores”. En el trayecto nos sorprendió (más allá de la tecnología “Magnetic Ride Control”, que pone a la suspensión en el punto ideal de desempeño y detallaremos más adelante) que el coche no presentaba esas vibraciones típicas de un convertible. Se siente con buen aplomo, no hace extraños movimientos laterales en curvas tomadas a gran velocidad y encontramos, aunque no lo crea, en el habitáculo una buena construcción que lo hacen “silencioso”. Y nos referimos al ruido de piezas sueltas o ruido que provenga del mecanismo de apertura del toldo de lona. Lo que no es para nada silencioso, es el propulsor que tendrá el Camaro ZL1 Cupé, el que sí viene a México. Se trata de un poderoso V8, de 6.2 litros de desplazamiento, que erogan los 580 caballos de fuerza, mencionado con anterioridad. El rugido que produce el motor, sobre todo en la versión manual, es muy propio, tan sabroso como su máximo rival, el Shelby GT500 (que más bien ya debería ser el Shebly 650, por el número de caballos). Según explican los ingenieros de Chevrolet, el ruido que produce al final de la aceleración o cuando se bajan las velocidades, se debe a que “la mezcla de combustible hace una serie de explosiones fuertes al final”, como sea, emociona escucharlo. Ya el la pista de Gingerman, el trazado contaba con una recta y una serie de curvas que a alta velocidad pusieron a prueba la estabilidad del coche. Nos gustó que el ZL1 apuntara a donde queríamos, con una dirección suave y que después de un largo rato de maniobrarla, llegamos a la conclusión de que no cansa. Los cambios manuales son cortos y precisos, auque desgraciadamente no pudimos pasar de tercera velocidad, ya que la pista le quedaba chica al auto. Más allá de la velocidad Sin embargo, pudimos probar algo esencial, per se que el auto es muy veloz, su estabilidad. La suspensión cuenta con el “Magnetic Ride Control”, cuya tecnología permite al conductor elegir tres modos de ajuste: Tour, Sport y Track. En pista manejamos con el modo Sport y el desempeño fue bueno. Se siente como trabaja la suspensión independiente en ambos ejes, al ser exigida con un giro intempestivo, hecho a propósito para sacarlo de balance. Lo único que pasó es que nos divertimos al ponerlo un poco de lado, para después encontrar rápidamente la trayectoria en la pista. También probamos su nivel de frenado, que no es tan preciso como un europeo, además de dar esa sensación “esponjosa” al pisar el pedal. Pero cuando pusimos el pie “con odio” sobre el pedal de freno al final de la recta, a unas 110 millas por hora, los frenos de discos Brembo, con calibradores de seis pistones adelante y cuatro pistones atrás, hacían su trabajo de forma eficiente. Otro elemento a destacar está en el cofre. El extractor de aire del motor se sitúa en la parte superior y no solamente es un elemento decorativo. Atrás el sistema de escapes es atraído del Corvette y fue adaptado para el ZL1. En cuanto al equipamiento que llegará a nuestro país, el ZL1 contará con el sistema “MyLink”, con pantalla táctil a color, de siete pulgadas, desde donde se pueden vincular smartphones vía Bluetooth. Este nuevo elemento se combina con el estilo clásico y conserva los medidores de presión de aceite, corriente eléctrica y temperatura, que están delante de la palanca de transmisión. Por otro lado, se podrá escuchar radio por Internet y tendrá íconos “similares a los de una tablet”. En este rubro, su archirrival, el Shelby GT500, queda a deber con una pantalla similar. En el habitáculo encontramos un ambiente completamente deportivo. El tablero, palanca de velocidades y volante, están forrados de “mocrofibra de gamuza”, que absorbe el sudor de las manos y al tacto permite sujetar el volante y palanca de mejor forma, sin que se resbale. Por otro lado, el tablero en su extrema derecha cuenta con el emblema “ZL1”, así como en las cabeceras de los asientos delanteros. Se trata de un 2+2, pero el Camaro ZL1 tiene mucha más orientación egocéntrica. Puede llevar a cuatro personas (los de atrás con espacio muy limitado) y tiene elementos que lo hacen amigable con el conductor, para un manejo tranquilo en el día a día, o para ser exigido en carretera y pistas. Lo único que le falta, y es cuestión de percepción, es el brío y por qué no, la “brutalidad” con la que acelera el Shelby. Sin embargo, contrario a esto, el Camaro ZL1 se deja domar, y adaptarse a él es más simple que al SVT de Ford. De esta forma, el ZL1 llegará a nuestro país a partir del mes de octubre, disponible a través de las Chevrolet Performance Stores, una de ellas por inaugurarse en Guadalajara la próxima semana. El precio por este “juguetito” es de 820 mil pesos, en ocho colores, más uno nuevo denominado “Ashen Gray Metallic”, ya sea con caja manual o automática, ambas de seis velocidades. Motor: Frontal longitudinal; V8; 6.2 litros de desplazamiento; 16 válvulas; Supercargado; Potencia- 580 CV @ 6,000 rpm. Torque- 556 libras-pie @ 4,200 rpm. Transmisión: Manual o Automática de seis velocidades (6+R), con doble embrague. Frenos: De discos ventilados adelante y de discos sólidos atrás, con sistema antibloqueo (ABS). Suspensión: Independiente en ambos ejes, con resortes helicoidales y barra estabilizadora adelante y atrás. Camaro ZL1 Cupé 2013 Un lugar donde encontrar la diversión Está justo en el anillo periférico tapatío, el lugar escogido por todos para probar la máxima velocidad de sus autos. Bueno, al menos lo era antes de las cámaras de foto-infracción. Por esto, el que salga de la Chevrolet Performance Store Milenio Motors, tendrá que hacer un esfuerzo por contenerse al salir con su Camaro o Corvette. Claro, más que el nuevo lugar donde encontrar los autos de alto rendimiento de Chevrolet, lo que la gente querrá ver el próximo jueves, 9 de agosto, a las 8:30 de la noche, con autos como el Corvette ZR-1, que manejamos por algunas horas en el autódromo Guadalajara. Es un coche que para encontrar rivales verdaderos, necesita cruzar el Atlántico y aterrizar en Italia, buscando nombres como Ferrari o Lamborghini. Pero la ventaja es que el Corvette está producido mucho más cerca, tiene refacciones más fáciles de conseguir y su precio es de menos de la mitad de lo que cuesta un exótico italiano. Lo mejor de todo es que el desempeño es similar, incluso superior. Claro, con un motor V8, supercargado, con 638 caballos de fuerza, el desempeño del coche es sensacional. Acelera como si tuviera potencia infinita y entra a las curvas con un agarre fenomenal. Pese a sus sistemas electrónicos para aumentar su de por sí magnífica estabilidad, es posible divertirse con el auto haciéndolo salir de trasera como debe de ser para disfrutarlo. ¿Quiere uno? Nosotros también. Y ahora, ya sabemos dónde encontrarlo. Equipo. Cuenta con tecnología “MyLink” y una nueva pantalla táctil. PESOS. Por el cupé manual o automático. 820,000 Temas Industria Automotriz Autos Lee También Falta mano de obra en el sector textil y del calzado Hoy No Circula lunes 20 de enero 2025: Autos que descansan en CDMX y Edomex 5 trucos de Google maps, que seguramente no conocías Sigue los consejos de la CONDUSEF antes de contratar un seguro de auto o moto Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones