GUADALAJARA, JALISCO (01/JUL/2017).- En el mundo de los autos en México la noticia de las últimas semanas ha sido el arribo de la nueva Peugeot 3008, que pierde la timidez adolescente de antes para salir a la calle y conquistar a muchos a su paso.Si antes era una alternativa discreta a las camionetas alemanas, japonesas o estadounidenses, ahora la Peugeot 3008 es definida como una SUV (vehículo deportivo utilitario, por sus siglas en inglés) por el fabricante, aunque sus dimensiones la mantengan más cerca de un crossover. La 3008 llega a la edad adulta en su segunda generación, con ganas de llamar la atención y con un encanto que aún se ve fresco y juvenil.La renovación estética de la 3008 es completa, aunque no la mecánica. Finalmente, tanto por fuera como por dentro, que es lo que más interesa a la gran mayoría, es un producto nuevo, cuyas formas agradaron de inmediato, tanto que en menos de un año en el mercado global ya son de más de 130 mil unidades vendidas.Cerca de 20 por ciento más larga, la nueva 3008 mejora el espacio trasero aunque no al nivel de algunas japonesas o estadounidenses. Lo que sí es superior a todo el segmento son los acabados y el nivel de equipamiento en la versión GT Line, como la que probamos.Entrar a una 3008 es ingresar a un mundo de lujo y buenos materiales. Los plásticos que la cubren son suaves a la vista y al tacto. Hay una franja de tela entre los forros de las puertas y el tablero, que lejos de significar algo inferior, aumenta su elegancia. Hemos visto esa área forrada de madera, en algunas versiones en Francia. Los asientos de la GT Line ya son forrados de piel y con una costura muy llamativa. Su forma abraza al cuerpo mejor que antes. Hay buen espacio y la visibilidad solo se compromete un poco de tres cuartos hacia atrás, por el espesor del pilar D y lo angosto de los cristales laterales traseros.Hay buena consola central, refrescada por aire acondicionado; dos portavasos de tamaño razonable y hasta una charola que permite cargar el celular por inducción, si el teléfono lo permite. La parte negativa es que hay un solo puerto USB en toda la camioneta, ubicado en la base frontal de la consola.Como PremiumPero hay cosas que no se encuentran en ningún otro producto que no sea Premium, y no cuestan lo que esta Peugeot. Uno de ellos es el tablero digital de instrumentos, bautizado i-Cockpit, que es una pantalla de 12.3 pulgadas con cinco distintas configuraciones. Desde la otra pantalla, la central, se puede ordenar la computadora para que proporcione al piloto y su acompañante masajes relajantes o estimulantes. También es posible aromatizar la cabina con hasta tres fragancias distintas, lo que es excelente cuando pasamos por lugares de olor poco agradable.Como ya lo dijimos anteriormente, el conjunto mecánico no sufre cambios. Se mantiene el motor de cuatro cilindros, turbo, con 1.6 litros y 165 HP (también hay versiones diésel), que manda la fuerza a las ruedas delanteras gracias a una caja automática de seis velocidades.Pese a que en teoría la suspensión trasera de ruedas tiradas y barra de torsión no es un esquema muy amigable con las curvas, el Control Dinámico de Peugeot, que consiste en una amortiguador central puesto horizontalmente entre las ruedas traseras, controla la inclinación y flexibilización de la carrocería de tal manera, que solo manejándola creemos que sea tan estable. Hemos conducido varios crossovers con suspensión trasera independiente que no se sienten tan bien en las curvas.La electrónica también es parte del arsenal de Peugeot para la 3008, que cuenta con frenado automática de emergencia; control de estabilidad y tracción, aviso de cambio involuntario de carril y otros detalles que la ayudan a mantenerse en su trayectoria y a proteger sus ocupantes. Por cierto, hay sistema de anclaje de sillas de niños y seis bolsas de aire.El diseño moderno, atrevido, incluso coqueto, sumado a un interior cuyo diseño, calidad de materiales y construcción; más un nivel de equipamiento que solo se encuentra en vehículos Premium y de gama más alta, hacen de este un platillo francés irresistible, incluso cuando su precio de 579,900 pesos pueda sonar alto, pero la nueva 3008 es un vehículo Premium, aunque la marca Peugeot no lo sea.