Seis hombres fusilados en Chihuahua

CIUDAD JUÁREZ.- Como si fueran tiempos de guerra, seis hombres fueron formados en la barda de un centro recreativo y luego los fusilaron utilizando rifles AK-47 y R-15, además de darles el tiro de gracia en la cabeza con pistolas calibres 9 y 45 milímetros.

La ejecución de estos seis hombres fue parte de una jornada que dejó 15 muertes en seis eventos distintos en el estado de Chihuahua, entre ellos cuatro en la comunidad del Ocote en el municipio de Guadalupe y Calvo, donde se enfrentaron dos grupos de sicarios que también dejaron cinco lesionados.

Alejandro Pariente Núñez, vocero de la Subprocuraduría de Justicia del Estado, zona norte, dijo que aproximadamente a las once de la noche, tiempo local, les reportaron una balacera en la pared norte del Centro Recreativo El Campanario, al este de la ciudad.

Al acudir encontraron a 5 hombres sin vida y uno más lesionado de gravedad el cual fue subido a una ambulancia de la Cruz Roja, para tratar de salvarlo, pero murió cuando llegaba a un hospital del IMSS.

Pariente Núñez agrega que las seis personas a las que mataron han identificado a dos de ellos como Jesús Manuel García Rosales, de 16 años de edad y Martín Omar Quiñónez López. Este último fue quien murió al llegar al hospital.

En el lugar del atentado autoridades ministeriales encontraron 80 elementos balísticos, calibres 7.62 x 39 de rifle cuerno de chivo, 223 de R-15 y de pistolas calibres.40 y 9 milímetros.

Los elementos del Servicio Médico Forense y de la Policía Ministerial Investigadora encontraron en la escena del crimen cinco víctimas mientras que la sexta estaba en el hospital a donde fue trasladado para tratar de salvarlos sin éxito.

De las primeras indagatorias realizadas por los agentes investigadores en el lugar de los hechos, se advierte que los ahora occisos fueron llevados hasta dicho lugar en varios vehículos de reciente modelo, y una vez en ahí les dispararon.

Versiones mencionan que fueron levantados el jueves en la mañana en la colonia Aztecas y que antes de matarlos los torturaron para saber quienes les daban drogas para distribuirla en las calles de la ciudad.

La persona que resultó lesionada, y que luego murió en el camino, Martín Quiñones López logró mencionar, antes de morir, su nombre y que habían sido levantados por un comando de hombres armados que se identificaron como miembros de La Línea (Cártel de Juárez) y que los acusaron de vender droga para el grupo llamado Gente Nueva, ligado al cártel de Sinaloa.

En este lugar los sicarios dejaron una cartulina que decía "Mensaje para todas las ratas, esto continuará".

Los vecinos del fraccionamiento y del centro Recreativo mencionan que estas personas suplicaban que no los mataran y luego los gritos de dolor.

En Juárez dos cuerpos más de hombres fueron encontrados baleados en el kilómetro 34.5 de la carretera Juárez-Porvenir, a la altura del poblado de Jesús Carranza a solamente 10 kilómetros de la ciudad.

La edad de estas personas es de unos 25 años y ambos murieron con balazos en la cabeza y huellas de tortura.

Además un hombre de oficio carpintero fue ejecutado a balazos en la colonia El Barreal fuera de su casa, lugar hasta donde llegaron hombres armados que le dispararon sin mediar palabras o amenazas.