Arrecia hostilidad para exigir la aparición de los normalistas

CIUDAD DE MÉXICO/CHILPANCINGO (09/NOV/2014).- La exigencia crece, y se torna hostil. Fue un sábado de protestas, cada vez más fuertes, para que aparezcan con vida los 43 estudiantes normalistas.

Pero, en Chilpancingo, el reclamo fue violento. Quemaron automóviles a la entrada de Palacio de Gobierno. Situación que se repitió por la noche en Palacio Nacional, donde un grupo de encapuchados quemó la puerta del emblemático edificio.

Con pancartas que mostraban insignias como “Ya me cansé de un México roto”, “Podrán desaparecer los cuerpos, pero no nuestras ideas”, miles de habitantes y la caravana “43x43 Ni un desaparecido más” alzaron la voz en el Zócalo capitalino para exigir al Gobierno un alto a la violencia, que cumpla con su trabajo de darle al pueblo seguridad, paz y justicia con dignidad.

Mientras la Procuraduría General de la República no muestre evidencias irrefutables de que los estudiantes de Ayotzinapa están muertos, las manifestaciones para que aparezcan seguirán, dijeron.

Antes, afuera de la Procuraduría General de la República, los protestantes se tiraron al suelo con pancartas en las que exigen justicia para los 43 normalistas.

Al concluir la protesta en el Zócalo, a su paso por Palacio Nacional, jóvenes golpearon y pintaron el portón de madera, al cual le prendieron fuego por algunos minutos, sin que hubiera elementos de seguridad que se los impidiera.

En Guerrero, sobre las 17:30 horas, enfurecidos estudiantes y otros civiles atacaron la sede del Ejecutivo en Chilpancingo, donde quemaron vehículos, en la primera protesta violenta desde que la PGR anunció el viernes que sus 43 compañeros desaparecidos fueron posiblemente masacrados. El Gobierno estatal ordenó no reprimir a los protestantes y sólo protegió con policías el ingreso al lugar.