Ignoran prohibición del perifoneo en ZMG

GUADALAJARA, JALISCO (22/JUN/2013).- La actividad comercial ambulante anunciada mediante bocinas, conocida también como perifoneo, está prohibida tanto en Guadalajara como en Zapopan desde diferentes fechas en sus respectivos reglamentos. No obstante, tales disposiciones son ignoradas y esta modalidad se lleva a cabo sin que los comerciantes sean molestados, pese a registrarse que los sonidos que emiten para anunciarse han llegado a superar los 90 decibeles, cuando lo permitido a escala federal para industrias fijas es de 65 (NOM-081-SEMARNAT-1994).

Es común escuchar y observar en la Zona Metropolitana de Guadalajara vehículos con altavoces que circulan a baja velocidad para promocionar todo tipo de productos, y aunque pareciera tratarse de un giro comercial de tradición al margen de la ley, no lo es en algunos municipios.

En Guadalajara, el Reglamento de Anuncios publicada en 2006 establece en su artículo 71 la prohibición de publicidad móvil y sonora, entre otras. Pero, pese a la negativa expresa de este tipo de propaganda, el reglamento es letra muerta y la nueva administración ni siquiera se percata de su existencia: al solicitar una entrevista sobre el tema, el municipio respondió que la regulación del perifoneo no es competencia suya, sino de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial.

Zapopan es otro caso similar. El Ayuntamiento cuenta con un Reglamento para el funcionamiento de aparatos de sonido que data de 1971, en donde su artículo séptimo indica: “Queda restringido el uso de aparatos de sonido instalados en vehículos como medio de propaganda comercial. Sólo se autorizará su funcionamiento para difusión de propaganda electoral durante el tiempo que determinen las leyes respectivas del Estado y Federal. También se podrán autorizar en aquellos casos que por causas de interés público a juicio de la presidencia municipal, lo ameriten”.

Además, el reglamento indica que las multas van de 50 a 500 pesos, y de 100 a dos mil pesos las reincidencias. Sin embargo, la práctica de perifoneo en algunas colonias de Zapopan es tan frecuente y tan molesta para los vecinos e ignorada por las autoridades, que los colonos han optado por buscar sus propias maneras de inhibir esa actividad.

• LETREROS Y SEGURIDAD PRIVADA

Vecinos “prohíben” el paso de vehículos con bocinas

En la colonia Jardines del Country en Zapopan, los vecinos se blindaron contra el perifoneo: colocaron letreros que buscan disuadirlos de vender en sus calles.

“Los letreros los pusimos hace dos meses, resultó la necesidad de bajar la contaminación auditiva, dicen que compran metal y lavadoras, pero en esta zona del uno al 10, cero personas venden (artículos en desuso a chatarreros)”, dijo el colono, Emilio Sánchez Rubio, quien señaló que primero se dirigieron con las personas que hacen perifoneo, para pedirles que regularan el volumen de su bocina, “les pedimos que no contaminen nuestro espacio con altos decibeles que son muy agudos y chillones”, y después externaron ante representantes  del Gobierno de Zapopan sus quejas e iniciativas por escrito y éstas incluyen al perifoneo.

Para solucionar su problemática, después de poner los letreros contrataron seguridad privada, que actualmente invita a quienes se dedican al perifoneo a salir de Jardines del Country. Al respecto, Sánchez Rubio dice que han bajado las quejas sobre el exceso de ruido y han notado la disminución de este comercio alrededor de 70 por ciento. Pero para su hermano, Roberto Sánchez Rubio, no hay mejora con los letreros, “continua todavía y es un poco molesto, nos molesta el volumen”.

A Dafne Ayala Coronado de 15 años la molestaban en sus horas de sueño, “el de la chatarra me levantaba, a varios vecinos les molestaba, pero ahorita ya no pasa”.

“Cada quien hace su lucha”, justifica el vecino Ricardo Gutiérrez a las personas dedicadas al perifoneo, pero advierte que los gaseros molestan de más porque “pitan, tienen música y aparte un altavoz, si estuviéramos hablando no se escucha nada, no es posible hablar”.

En busca de silenciar a los altavoces, compartió que colocarán más letreros en puntos como Avenida de la Presa, Avenida Manuel Ávila Camacho, Avenida Patria y  Avenida Circunvalación, para que las personas dedicadas al perifoneo se den cuenta en las distintas entradas a la colonia que los vecinos de Jardines del Country prefieren que no los visiten.

TESTIMONIO

Vivir de las ventas de un altavoz

Martín Rodríguez Jiménez viaja en la caja de una pick up junto a la fruta que vende, es atormentado por una bocina y se protege del sol con una gorra que ha perdido color y rigidez, “sale la naranja tres kilos por 20, sale la naranja tres kilos por 20”, emite una voz desde una bocina un volumen que puede ser apreciado en dos cuadras de la avenida Fidel Velázquez Sánchez en Jardines del Country, en Zapopan.

No hay vecinos que se acerquen a comprar los plátanos y naranjas. Martín tiene cinco años en el perifoneo de la fruta y se jacta de brindar un ejemplar servicio cuando toca puertas, y espera a la gente que quiere comprar la fruta, personas que asevera son muchas en la colonia Jardines del Country.

Para el comerciante, la molestia de los habitantes por el perifoneo radica en los que no compran víveres, ya que los adquieren “en Walmart o Aurrera y se los dan más caros, nosotros le ponemos la fruta a domicilio, ahorita que hace mucho calor, nosotros se la ponemos en la puerta de su casa”.

Nadie de seguridad privada en Jardines del Country vino a pedirle a Martín que se fuera con el sonido mercantil, y no le importó mucho los letreros que prohíben perifoneo que dejó casi 20 metros atrás, inclusive dice no haberlos visto.

Viene a vender con frecuencia a la colonia citada y nunca ha recibido ninguna llamada de atención porque comparte que nunca lo han reportado los vecinos y siempre ha habido un buen trato hacia ellos, también comercializa fruta en Santa Tere en Guadalajara y en otras colonias de Zapopan.

Dice que los cinco años de perifoneo no han causado estragos en su oído y sólo los han acostumbrado al rezo de ventas, que cambia según la temporada y las ofertas. La voz de la grabación es la del papá del patrón, una voz aseñorada y monótona con un ritmo uniforme que puede ser percibido a distancia, pegajosa y plana.

“Hay veces que estoy dormido y escucho la bocina, estoy acostado y hay un ruido en mi oído, pero es normal, no pasa nada”.

LA VOZ DEL EXPERTO

Su regulación debe ser tarea de Movilidad

Martha Orozco (Investigadora del CUCBA de la UdeG)

“El perifoneo se puede considerar contaminación auditiva tanto fija como móvil. Sin embargo, las unidades móviles no se han regulado por falta de interés de las autoridades. Un comercio fijo que lo utilice es controlado, pero las unidades móviles tendrían que ser tarea de Movilidad”, considera Martha Orozco, profesora e investigadora del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias de la Universidad de Guadalajara.

Indica que la importancia de darle un trato serio al tema de la contaminación auditiva radica en lo excesiva que resulta en la ciudad: “Existen puntos críticos como la zona Centro de Guadalajara, donde no sólo existe ruido proveniente del parque vehicular, sino de la actividad comercial, porque se utilizan bocinas en establecimientos para promocionar y vender sus productos. Lo alarmante es que algunos no respetan la norma (máximo 68 decibeles en el día y 65 en la noche) e incluso sobrepasan los 90 decibeles”.

Enfatiza que sí existe presión de la ciudadanía para que el gobierno ataque los excesos del perifoneo,  pero lamenta que este llamado no se haga efectivo en los casos de Guadalajara y Zapopan, donde sí está reglamentado en papel y no en hechos; mientras que en el resto de la zona metropolitana permanece como una laguna legal.

EL DATO

Ignoran la ley

> En Guadalajara el perifoneo está prohibido por el artículo 71 del Reglamento de Anuncios, pues entra en la categoría de publicidad móvil y sonora que no se permite.

> En Zapopan lo prohíbe el Reglamento para el funcionamiento de aparatos de sonido en su artículo siete, donde habla de la negativa a vehículos con aparatos de sonido para hacer promoción.

> El resto de la ZMG carece de regulación.

En el resto del país...

> En otros municipios del país como Matehuala en San Luis Potosí, y Novojoa en Sonora, han establecido cuotas para quienes realizan la actividad de perifoneo en su territorio, así como multas para quienes incumplan con el permiso. Sin embargo, estas normativas omiten señalar un volumen tope para la promoción de los productos.