Hay inequidad en tratamiento de la insuficiencia renal

GUADALAJARA, JALISCO (13/MAR/2014).- La insuficiencia renal crónica, además de ser un padecimiento que degenera a quien la padece, sufre de inequidad frente a otras enfermedades, pues no está dentro del catálogo de patologías que cubre el programa Seguro Popular.

Sólo quien cuenta con seguridad social como IMSS o ISSSTE pueden tener acceso a un tratamiento de diálisis o hemodiálisis gratuito, de lo contrario, la gente debe erogar fuertes cantidades que terminan por dejarlos en la quiebra.

Hoy se conmemora el Día Mundial del Riñón, y se estima que en Jalisco existen cerca de 600 mil personas con la enfermedad, de las cuales una décima parte son menores de edad, y cerca de seis mil están en algún problema de diálisis o hemodiálisis.

El nefrólogo del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, Guillermo García García, asegura que el Seguro Popular tiene una deuda grande con la comunidad de enfermos insuficientes renales, porque a pesar de ser una enfermedad catastrófica por el gasto que requiere, no se ha agregado al catálogo de patologías a ser atendidas.

“El Seguro Popular, que se suponía que iba a venir a resolver este problema, han pasado ya 11 años de su creación y todavía no cubre esta enfermedad”.

Una persona con esta enfermedad paga de 80 a 170 mil pesos anuales en sus tratamientos, dependiendo si es diálisis peritoneal, hemodiálisis o trasplante renal.

García García señala que es común observar que los pacientes y familiares se endeuden y vendan el poco patrimonio que tienen para poder solventar los costos de la enfermedad.

“Cuando no tienen cómo llevar los gastos, se abandona el tratamiento y conduce a una muerte segura”.

Prevenga síntomas

Los síntomas de la insuficiencia renal crónica se presentan en etapas avanzadas, cuando la función del riñón es mínima.

El reto es que la enfermedad se detecte cuando todavía no hay signos como falta de apetito, náuseas, vómito, debilidad y malestar generalizados, palidez, retención de líquidos, hinchazón y elevación de la presión arterial o pérdida de peso involuntaria, pues son signos de una etapa avanzada.

La única forma para detectar la enfermedad es a través de un examen general de orina y una medición de creatinina en sangre, ambos, fáciles de encontrar en un laboratorio y accesibles a la población.

REQUIERE HEMODIÁLISIS TRES VECES POR SEMANA
Catalina vive con la enfermedad y sin apoyo del Seguro Popular

La sangre de Catalina Mandujano Ramírez requiere ser purificada y filtrada tres veces a la semana, para liberar los desechos y evitar una contaminación en el organismo.

Tres días de su semana se conecta a una máquina para que ésta haga las funciones que tendrían que hacer sus riñones, pero que desde hace tres años dejaron de hacer, a causa de la insuficiencia renal crónica que se le diagnosticó.

“Ahorita tengo que venir a las hemodiálisis tres veces a la semana; me saca las toxinas que el riñón no desecha; mi riñón trabaja en un 5%, nada más para desechar orina, no para desechar toxinas”.

Catalina es paciente del Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, afiliada al Seguro Popular. Sin embargo, el programa no cubre la insuficiencia renal crónica en los adultos, por lo que los gastos de su enfermedad corren a cuenta de lo que pueda conseguir.

Antes de saberse enferma, Catalina ganaba su dinero en un puesto de gorditas que ella misma elaboraba. Ahora, por el cansancio, hay días en que no puede levantarse de la cama en todo el día. Además, tiene prohibido acercarse mucho al fuego, por lo que no tiene ninguna entrada económica, sólo la que logra conseguir al hacer algunas tareas en el negocio de su hermana.

Tiene 48 años y es vecina de Lagos de Oriente. Nunca se casó ni tuvo hijos. La causa de su insuficiencia renal crónica son pequeños quistes en ambos riñones, condición que heredó.

Catalina también es hipertensa, y la enfermedad le vino después de ser diagnosticada con su mal en los riñones.

Cuando va a sus terapias de hemodiálisis, Catalina paga lo que puede; algunas veces 50 pesos; otras, 200, dependiendo del dinero que alcance a tener.

Ve negativo que un programa como el Seguro Popular no atienda estas enfermedades catastróficas, que además de dolorosas son costosas para quien las padece y su entorno.

Enterarse de que padecía insuficiencia renal crónica ha sido una prueba difícil, y al mismo tiempo de aprendizaje.

“He aprendido que hay que vivir el  momento lo más que se pueda, y tratar de aceptar la enfermedad, porque si no es un sufrimiento muy grande”.

EL DATO
Solicita apoyo

Catalina requiere de urgencia que se le instale una fístula para que por ahí se haga la hemodiálisis, la cual tiene un costo cercano a los 12 mil 700 pesos.

Si desea ayudarla puede llamar a  los teléfonos  36 14 29 57 y 36 58 32 17.

NUMERALIA
Cifras de trasplantes

2,821 personas, aproximadamente, están a la espera de un riñón para ser trasplantado, de los cuales casi seis de cada 10 son personas menores de 35 años de edad, según el Consejo Estatal de Trasplante de Órganos y Tejidos (CETOT).

447 trasplantes de riñón en toda la Entidad se realizaron en 2013. Desde el año 1976 a la fecha, en Jalisco se han realizado más de cinco mil 500.

1,566 trasplantes de riñón en el Estado han sido de donador vivo y 940 de donador cadavérico.

SABER MÁS
Celebración anual

Desde 2006, el Día Mundial del Riñón se celebra el segundo jueves de marzo, con la finalidad de que la gente conozca la importancia del cuidado de los riñones.

Se estima que tres de cada 10 diabéticos e hipertensos tendrán enfermedad renal en alguna etapa de su vida.

Las áreas de hemodiálisis de los hospitales públicos en Jalisco presentan saturación de pacientes.