''Dale, dale, dale'', piñatas para todos

GUADALAJARA, JALISCO (15/DIC/2012).- Las hay de todos tamaños. De cinco o siete picos, con la figura de Santa Claus, de Mickey Mouse o de un venadito. Lo que importa es que en toda posada no falte la piñata para quebrarse y lograr la recompensa en dulces y frutas que lleva dentro.

Esta figura hecha de periódico, engrudo, cartón y papel metálico, es capaz de reunir a familias enteras, de parar de la silla al más cansado y de hacer cantar el "dale, dale, dale, no pierdas el tino" hasta al más tímido.

Para José Antonio Alaníz Gutiérrez, hacer piñatas siempre ha formado parte de sus días. En 1944, sus padres iniciaron el negocio de la elaboración de piñatas y, a la fecha, los 14 miembros que quedan continúan con la tradición, que según su punto de vista, ha bajado considerablemente.

"En los años 70, era una locura vender piñatas; vendíamos hasta 200 piñatas por día, y la mayoría de los 14 hermanos trabajábamos día y noche, unos en un turno y otros en otro, para poder sacar toda la producción, pero ahora la gente rompe menos piñatas".

Su negocio está en el cruce de Jesús García y Cruz Verde, en donde fabrica las piñatas junto a otras dos personas. Ahí se pueden encontrar piñatas desde los 150 pesos, hasta en más de 200, dependiendo de la dificultad de la figura.

"Es un arte", menciona orgulloso; en cada piñata se lleva hasta tres horas y media, sin contar que durante tres días se tuvo que poner a secar el centro a base de periódico y engrudo.

En la misma cuadra de Jesús García está el negocio de Elizabeth Portillo, quien junto a su familia empezó en el negocio desde hace 12 años. Ahora cuenta con su propio local, que comparte con dos socias.

Mientras era entrevistada, Elizabeth pegaba con cinta canela cada uno de los picos de cartón en la bola central de papel periódico, cortaba otras piezas y unía otras.

"Este negocio es muy noble, el material es muy barato y nosotros cobramos más la mano de obra, es mucho trabajo, y vendemos las piñatas de pico desde 60 pesos, y hasta 180, o más caras, dependiendo".

Esta época es buena para el negocio, aunque las fiestas infantiles siempre permiten que haya ventas de piñatas con figuras de personajes de todo tipo.

"Soy una de las mejores piñateras a nivel Jalisco, no te la vas a encontrar en ninguna parte; amo lo que hago, hay días en que hago hasta 60 piñatas por día".

Tradición

Aunque se crea así, México no inventó la piñata. Algunas opiniones coinciden en que vino de China, en el siglo XII, en donde se utilizaba para hacer rituales de inicio de alguna estación del año, lo cual, se pensaba que daba suerte.

Con el paso del tiempo, la piñata empezó a sufrir modificaciones. Primero se hacía en forma de animales para ciertos rituales. Para otras personas, la piñata tiene que ver con cuestiones religiosas como las de cinco picos, que representa la estrella de Belén; o con siete, que representan los siete pecados capitales, los cuales se destruyen al pegarle con fuerza.

Antes se utilizaban cántaros de barro para el centro de la piñata, y después se empezó a usar más el papel periódico y cartón.

Tips

Para estas posadas, se pueden encontrar piñatas de todo tipo en la zona de Santa Tere, Mezquitán, San Juan de Dios, e incluso algunas dulcerías.

Los precios varían dependiendo el tamaño y forma, pero pueden encontrarse desde los 30 pesos, unas muy sencillas y pequeñas, hasta los más de 200 pesos las más elaboradas.

A la piñata se le puede echar fruta como mandarina, trozos de caña y limas, así como cacahuates, colaciones y dulces de todo tipo.

EL INFORMADOR / THAMARA VILLASEÑOR