Movilizan fondo de urgencia en Francia por inundaciones

PARÍS, FRANCIA (06/JUN/2016).- El primer ministro francés, Manuel Valls, anunció hoy que el Estado ha decidido movilizar un fondo "de extrema urgencia" dotado con varios millones de euros para gente sin recursos que lo haya perdido todo en las recientes inundaciones en el país.

El fondo, indicó en conferencia de prensa, estará gestionado por los departamentos y se activa para poder atender las situaciones más urgentes "en estos momentos difíciles", a la espera de la gestión de las aseguradoras.

El jefe de Gobierno detalló que muchos de los procesos administrativos anteriores se han simplificado para agilizar la entrega de compensaciones a los afectados, que incluyen a "gente que no puede volver a sus casas".

"El mecanismo de indemnización se activará completamente", añadió Valls, que recordó que el próximo miércoles, en el Consejo de Ministros, se declarará el estado de catástrofe natural para las zonas más perjudicadas por el temporal registrado esta pasada semana.

La cifra de víctimas no ha variado en las últimas horas y se mantiene en cuatro muertos y 24 heridos.

Una primera estimación de la Asociación Francesa de Aseguradoras sitúa en 600 millones de euros los gastos materiales, mientras que otros grupos como la MAIF elevan el coste a los "dos mil millones de euros".

"La movilización es total y no ha terminado. La crisis no acaba cuando el agua empieza a bajar", añadió Valls, según el cual se impone también un trabajo a medio y largo plazo sobre la prevención de este tipo de sucesos.

El servicio de meteorología Météo France detalla que 14 departamentos franceses se encuentran en alerta naranja, que obliga a la población a aumentar su precaución por el riesgo meteorológico existente y cierto grado de peligro para las actividades usuales, pero ninguno ya en roja, la máxima prevista.

En la noche del 3 de junio, según la estación de medición de Austerlitz, en el corazón de la capital francesa, el Sena registró un pico de 6.09 metros, el mayor desde 1982 (6.18), pero todavía lejos de los 8.62 de la gran inundación de 1910.

Valls advirtió hoy de que la decrecida va a ser lenta y que hay que seguir "vigilantes", al tiempo que señaló, a modo de ejemplo de la amplitud de los daños, que todavía hay siete mil clientes de la red EDF sin electricidad.