Rodrigo Murray llega al Teatro Galerías

GUADALAJARA, JALISCO (13/JUN/2011).- ¿Se puede ser completamente honesto y congruente en un medio tan complicado como lo del espectáculo? Rodrigo Murray, actor de todo tipo de géneros y escenarios piensa poco antes de responder: “Hay dos tipos de personas que siempre dicen la verdad: los niños y los borrachos”, afirma antes de explotar en una carcajada.

El actor, famoso por su trabajo en cine, en televisión y también por ser uno de los principales promotores del teatro en México, trae al Teatro Galerías la puesta en escena Un dios salvaje, donde comparte papeles estelares con Ludwika Paleta, Pablo Valentín y Mónica Dionne.

Vía telefónica desde su casa en la Ciudad de México y cuidando en todo momento al pequeño Martín, su hijo de casi dos años, Murray explica las virtudes que tiene Un dios salvaje, obra donde la naturaleza humana se muestra tal cual, luego de que el alcohol termina por desenmascarar a sus protagonistas, él incluido: “Cuenta la historia de dos matrimonios que se reúnen para dirimir los problemas que surgieron por culpa de sus respectivos hijos, en donde uno le rompió los dientes al otro. Entonces estos matrimonios se reúnen civilizadamente, pero a la mitad de la obra los cuatro entran en un estado de ebriedad muy fuerte que les va quitando lo civilizados (risas)”.

Murray anota que si la actuación es un arte difícil de dominar, fingir que se está “pasado de copas” y seguir actuando es algo todavía más complicado. “Requiere un entrenamiento especial, porque no es lo mismo actuar borracho que actuar como ‘si’ estuvieras borracho. La obra es muy divertida porque se dicen verdades que sólo dicen los niños y los borrachos, ellos nunca mienten (risas)”.

— Con tanto trabajo en cine y televisión, includios algunos comerciales, muchos creerían que Rodrigo Murray ha ido dejando de lado el teatro.
— “Pero no, me encanta hacer teatro porque es un entrenamiento que deben tener los actores como norma de vida, además de que lo puedo compaginar con la televisión y el cine. Afortunadamente tengo un programa de televisión donde me va muy bien, que se llama Password y también he hecho una serie y un par de películas en mis ratos libres. Pero trato de organizarlo todo para poder hacer teatro por la noche los fines de semana”.

— ¿Qué tiene de especial “Un dios salvaje para aceptarlo como proyecto”?
— “Le di el sí a la obra porque me parece que está muy bien escrita por una mujer como Yasmina Reza, que es una dramaturga y actriz francesa espléndida, además de que me pareció muy interesante trabajar con Javier Daulte, que es el director que montó la puesta originalmente en Buenos Aires y ahora la trae aquí integra, pero no igual, porque somos otro elenco y se hace una dinámica diferente”.

— Algunos actores dicen que entrar en un personaje nuevo es como estrenar zapatos, al principio se siente un poco complicado caminar con ellos porque hay que irlos “moldeando”, ¿cuánto trabajo fue necesario para moldear el papel que interpretas (“Miguel”)?
— “Fue un proceso muy rápido, y de eso me doy cuenta cuando puedo empezar a bromear y a decir cosas que están fuera del guión original pero que entran bien en la obra. Es cuando el personaje ya comienza a pensar un poco por sí mismo, aunque el dominio perfecto de un papel no existe, siempre hay cosas que salen mejor que otras de función a función. Fueron tres semanas para caminar cómodo en estos zapatos (risas)”.

— El director de escena de “Un dios salvaje” es argentino y la escritora de la obra es francesa, ¿cómo está la escena teatral mexicana?
— “En un momento fantástico. La cartelera en la Ciudad de México es maravillosa porque existen hasta ochenta opciones distintas, uno puede ir a ver cualquier cosa, desde grandes puestas, montajes intelectuales, teatro de búsqueda, comercial, estudiantil y más. Creo que eso le dota a una ciudad una etiqueta muy cosmopolita, como sucede con Nueva York, una urbe que recibe visitantes que van exclusivamente a ver qué ofrece su cartelera comercial”.

— ¿Y eso se refleja en ciudades como Guadalajara?
— “Guadalajara es una ciudad de donde han salido grandes artistas y propuestas, además de que tienen instalaciones maravillosas. Creo que su problema es que la gente de Guadalajara no va a ver el teatro que se hace en su ciudad y a veces privilegian el que viene de fuera”.

Un dios salvaje / 14 y 15 de junio / Teatro Galerías, 19:00 y 21:30 horas horas / Boletos
de 250 a 350 pesos


A doble pantalla

Rodrigo Murray reconoció que hasta ahora el programa Password ha tenido éxito porque “respeta al público. La diversión y el entretenimiento no tienen que tener a una mujer con poca ropa, exponiendo su baja cultura o insultando al público. Creo que a partir de allí un programa puede ser divertido o entretenido, y Password busca ser una opción familiar”. El show se transmite los sábados a las 22:30 horas por Azteca 13.

El histrión agrega que pronto regresará a grabar una nueva temporada del programa Doble cara, además de entrar en una telenovela en Azteca que “hasta ahorita se llama Huerfanas y allí voy a hacer un personaje común y corriente de telenovela, no me prende mucho la idea pero voy a hacerlo”.
En cine, Murray espera el estreno este año de tres proyectos donde estuvo involucrado: Tlatelolco, Castidad y Me late chocolate.

EL INFORMADOR/ FRANCISCO GONZÁLEZ