Noah Mills, bendito entre las mujeres

CIUDAD DE MÉXICO (03/ENE/2014).- Para muchos, Noah Mills es sólo una cara bonita con perfectos abdominales. Sin embargo, este nativo de Maryland, Estados Unidos, se ha empeñado en demostrar que hay vida más allá del modelaje, oficio que no solo le ha dado a ganar fama, sino también algunos millones de dólares.

En 2010, el maniquí sorprendió con su participación en la película Sex And The City 2, en la que interpretaba a un trabajador de la construcción que sostiene relaciones con la simpática cougar “Samantha Jones”, papel representado por Kim Cattrall.

Tanto interés le ha despertado el campo del cine que este año estrenó Wracked, un cortometraje en el que fungió como protagonista, escritor y productor. En el filme personificó a un ex recluso que intenta recuperar su vida luego de pasar cinco años en prisión.

El típico chico de al lado

Noah Mills nació en 1985. Cuando era adolescente, una de sus hermanas envió fotografías suyas a una agencia de modelos en Canadá. Su debut sobre las pasarelas se dio en 2004 para las firmas Gucci e Yves Saint Laurent, en Milán y París, respectivamente.

En 2005 firmó un jugoso contrato con el dúo italiano Dolce&Gabbana, que ha sido artífice de gran parte de su éxito como modelo. Ese mismo año, fue fotografiado por Steven Meisel para una provocativa campaña de la marca, en la que Mills llevaba el pantalón por debajo de la cintura.

Su estatura, cuerpo musculoso e inocente sonrisa han llamado la atención de firmas de renombre como Tommy Hilfiger, Michael Kors, Salvatore Ferragamo, Calvin Klein, Bottega Veneta, Emporio Armani, entre otras.

Gracias a este oficio, el norteamericano ha tenido oportunidad de convivir con varias de las modelos más deseadas del planeta, como Gisele Bündchen, Claudia Schiffer, Laetitia Casta, Eva Herzigova, Kate Moss y Toni Garrn.