Kate se reconcilia con la televisión

CIUDAD DE MÉXICO.- La vida de Kate del Castillo ha dado giros en direcciones impredecibles. Primero, se convirtió en estrella juvenil de la televisión mexicana y parecía que su camino sería andar de un estelar a otro en las producciones de Televisa. Luego se casó con el futbolista Luis García, una relación que enfrió su carrera y a la larga marcaría su vida en el aspecto negativo (por el abuso que sufrió), pero también tuvo algo de positivo.

Y es positivo porque con el fin de su matrimonio, decidió que ya no estaría atada a una relación o a un género de actuación. Ni siquiera a un país. Así que tomó sus maletas y comenzó a recorrer América buscando dónde podía establecerse, hasta que se topó con Los Ángeles, una ciudad donde las promesas de éxito parecen tocar la puerta de todos, aunque hay que trabajar muy duro para que éstas se hagan realidad.

En el año 2007 se vio en la cinta La misma Luna, película donde daba voz a la tragedia de la migración mexicana a Estados Unidos. Su vida seguiría en ascenso. Recientemente firmó para ser el rostro, junto a Penélope Cruz y Eva Longoria, de la firma de cosméticos L’Oreal París en Estados Unidos, y sus apariciones en la televisión estadounidense se multiplican: Primero en The Cleaner y luego en Weeds y tras este vertiginoso camino la vida de Kate deja de girar sin rumbo, y su dirección ahora sí es predecible: El éxito.

Mujer con poder

Kate ahora está en boca del público americano. No es que hablen de Muchachitas (novela que la dio a conocer en nuestro país), sino de su papel como la desalmada Pilar Zuazo, una poderosa criminal y némesis de la protagonista Nancy (Mary Louise Parker) en Weeds, serie anglosajona que se ambienta en nuestra frontera Norte. “Me gusta encarnar a una mujer latina con tanto poder -afirma- porque usualmente se nos dan papeles de seductoras, coquetas o sirvientas. Interpretar a alguien con tanto poder es muy divertido”.

Contra la idea popular, Del Castillo agradece ahora el haber estado trabajando en las telenovelas mexicanas, pues obtuvo una herramienta fundamental: La rapidez. “Cuando hacía melodramas en México tenía que repetir mis escenas 40 veces para que fueran perfectas. Después de haber protagonizado tres o cuatro te quedas con muchas herramientas y con una enseñanza valiosa: No hay tiempo que perder. Fue como un campo de entrenamiento y ahora doy gracias, no me avergüenzo”.

El amor como principal arma

No es un secreto que la partida de Kate de México tuvo, entre otras razones, el que no le daban oportunidades en el cine debido a su pasado en las telenovelas. “Fue muy duro al principio, dejar en ese entonces las telenovelas fue como un divorcio, y venir a Estados Unidos fue la solución. Aquí llego y hago mi audición, soy sólo otra actriz, y si obtengo un trabajo es por mi talento, no por las telenovelas donde he estado o por quien es mi padre. Es diferente y lo amo, porque siempre es empezar desde cero”.

Pero no todo en Estados Unidos le parece perfecto. Del Castillo crítica un poco la dependencia al trabajo que ha encontrado entre sus compañeros en general. “Cuando camino por el foro todos tienen siempre un celular en la oreja. Les llamo a mis amigos para salir y me dicen que no tienen tiempo, que me agendarán algo para la próxima semana, pero ¡yo quiero salir ya! (risas). Creo que en México somos un poco más espontáneos, sin depender tanto del tiempo”.

El dato

Kate del Castillo será la portavoz e imagen de L’Oreal París, y como parte de la campaña de promoción viajó a París para grabar el comercial de televisión, mismo que está programado para estrenarse en Estados Unidos este otoño. “Me siento verdaderamente honrada de unirme al grupo de mujeres que representa la marca L’Oreal París, porque son mujeres llenas de inspiración y confianza en sí mismas”, afirmó la actriz.

La frase

“Después de haber protagonizado tres o cuatro (telenovelas) te quedas con muchas herramientas. Fue como un campo de entrenamiento y ahora doy gracias, no me avergüenzo”.
Kate del Castillo, actriz