GUADALAJARA, JALISCO (24/OCT/2016).- La joyería no sólo se aprecia por el valor de los metales involucrados en su creación. En México existe una generación de diseñadores que se enfocan en brindar un valor agregado: la creatividad. Apegarse a las tendencias internacionales de la joyería clásica no es su prioridad y eso lo demuestran los tres diseñadores ganadores de la 29 edición del Concurso Internacional de Joyería impulsado por la Cámara Joyera de Jalisco bajo la temática “Memoria Litoral”, que da paso a nuevas visiones del diseño de autor a través de tres categorías: la digital, la orfebre y la experimental.Los ganadores fueron la regiomontana, Mariana Vázquez González y los tapatíos, Jazmín Villar Gutiérrez y Alejandro Rodríguez Mendoza, quienes destacan que hoy en día el comprador valora más las fusiones orgánicas en materiales y diseño, lo cual fortalece la nueva faceta de la joyería mexicana.Transformación del marAunque Mariana no tiene una preparación académica en el diseño, su vida ha estado siempre relacionada a las artes a través de la pintura, la escultura y el tallado, elementos que la impulsaron a proyectar “Razzmatazz”, su marca que apuesta por el diseño de autor con piezas únicas que la catapultan a un mercado creciente en Monterrey, Nuevo León. Mariana Vázquez se coronó con el primer lugar de la categoría experimental, rango en el que su pieza fue valorada por la mezcla de materiales: “Recogí objetos que salían del mar como tablas de madera a la deriva y corales que se han ido desprendiendo naturalmente. Con la pieza reflejo el intercambio de dos mundos, de cómo algunas cosas son arrastradas por el mar y después regresan transformadas en otra cosa”.Diseño exactoEgresada de la carrera de diseño del ITESO, esta creativa se ha enfocado en el calzado y la joyería, siendo esta última disciplina la que la ha colocado como un referente del potencial tapatío en el diseño. Tres veces ganadora de la categoría digital, Jazmín Villar Gutiérrez, ha encontrado en el diseño virtual un nuevo nicho de inspiración y reto en su trayectoria. Desde hace tres años Jazmín ha impulsado su marca bajo su propio nombre y de manera independiente ofrece diseños más de autor: “Tenemos un mercado muy tradicional en Guadalajara que busca la joyería más comercial de tiendas reconocidas y con años de experiencia en el mercado. El diseño de autor ha cobrado una fuerza muy especial, la gente ya no busca la pieza sólo por el valor de su material; ahora busca que tenga algo especial, con lo que pueda identificarse. Los diseñadores independientes tenemos un poco de ventaja, porque no tenemos miedo a experimentar con formas, materiales, ni técnicas y en eso muchas marcas se han quedado atrás con la joyería tradicional”.Artesanía del lujoAlejandro Rodríguez, ganador de la categoría en orfebre, optó por llevar en diseño una de sus pasiones: las anémonas. Y aunque su formación inició en el diseño gráfico, la necesidad de explorar nuevas facetas lo llevó a la joyería de autor dando por resultado su marca “Metamorféame 925”, con la que pone de manifiesto la creatividad que se respira en Guadalajara por experimentar la mezcla de materiales y conceptos: “Básicamente mi pieza ganadora es en plata con terminados de laca acrílica. Me gusta el metal negro, pero no lo hay de manera natural, en este caso quise darle color a la pieza. Es un brazalete que simula una anémona, pero no tan real, porque es algo figurado. Está integrado por dos pulseras, la interior lleva 115 alambres que figuran la anémona”. Aunque desde hace siete años Alejandro está inmerso en el diseño de autor, reconoce que la joyería comercial aún acapara el mercado por ello trabaja en ambos aspectos: “Existe un mercado, pero hay que buscarlo. Tenemos que re-educar al comprador, hay mucha bisutería y la gente se está acostumbrado a ella; obviamente tiene que ver con los precios”.