El alma mexicana de Chicago

GUADALAJARA, JALISCO (16/ENE/2011).- El más fuerte, el más exitoso y el más popular sobrevive. Ésa es la máxima con la que se mueven los grupos y artistas, independientemente de su género o el país donde toquen, sólo aquellos que poseen un talento genuino pueden aspirar a romper las dos barreras más duras en su medio: La de la crítica y la del tiempo.

La primera es una que no tardó en derrumbar a Chicago, grupo que en sus años mozos era considerado como uno de los grandes monstruos del rock fusionado con pop. Llenaban estadios y sus melodías acaparaban lugares en la radio de países anglosajones e hispanoamericanos.

Pero la segunda, la del tiempo, no fue tan fácil de romper. Robert Lamm recuerda, mientras habla con este medio, aquellos años, que califica como divertidos. Dice que no extraña ser el grupo “hot” del momento, porque a final de cuentas, siguen presentes, siguen tocando y subiéndose al escenario. “No pienso que seamos una banda reservada para los viejos fanáticos, tenemos todavía mucho que ofrecer”.

Y algo le sabe Lamm (vocalista, tecladista y compositor) al misterioso mundo de la fama y la música, porque ha logrado hacer que Chicago sobreviva a las modas, a las décadas y a las peleas internas sin apenas un razguño.

Emocionados

Mantener unida a una banda como Chicago es difícil, pues por ella han pasado decenas de músicos, aunque el “núcleo” del grupo ha permanecido por más de 25 años: Robert Lamm en la voz, James Pankow en los trombones y percusiones, Lee Loughnane en la trompeta y Walter Parazaider en los coros entre otros.

“Nosotros como banda somos quienes tenemos mucho que agradecer a la gente –explica Lamm- porque son ellos los que nos permiten seguir en el escenario, armar giras y hacer lo que amamos”. Esa comodidad se ve más reflejada en México, país al que el músico afirma conocer bastante bien. “Aquí la gente es extremadamente apasionada, es uno de mis públicos favoritos. Además de que conozco el país, he venido de vacaciones por lapsos prolongados y he disfrutado de su hermosísima naturaleza y hospitalidad”. El vocalista citó a Monterrey y Baja California como sus destinos favoritos.
Justamente la primera prueba de este nexo entre el territorio azteca y la banda nacida en Ilinois se dio el jueves en la Arena Monterrey, donde el grupo comenzó su gira en México. “El público es quien decide el rumbo que toma el show. Muchos piensan que los espectáculos de Chicago están reservado sólo a los fanáticos de décadas pasadas, y eso es cierto y falso (risas). Cierto porque tocaremos los clásicos que a muchos les gustan, pero también tenemos algo para quienes jamás han escuchado sobre nosotros. Es un espectáculo de rock en todo el sentido de la palabra”.

Mariachi y balada

Muchos artistas extranjeros dicen tener empatía con el país que visitan, pero para Lamm esto es más que simples palabras. “Tengo la oportunidad de visitar muchos países con Chicago y familiarizarme con varias culturas, pero México y su música tienen algo especial. El mariachi me encanta, es algo que me fascina, porque en California se escucha mucho, es variado y puede llevarte por diversos caminos”.

¿Qué tiene preparado para Guadalajara? “Nervios, muchos”, afirma entre carcajadas Lamm, quien agrega que una vez sobre el escenario del Telmex “no pensaremos más en nosotros. Chicago le cede la batuta al público y serán ustedes quienes nos digan qué canciones quieren escuchar”.
Happy Man, Wake Up, If you leave me now y I am a man son algunas de las preferidas del público, aunque Robert Lamm tiene sus propias “consentidas”: “Es difícil decir si hay alguna que me gusta más que otra, sobre todo porque todas las escribí (risas). En ese caso, tendría que confesar que me encanta cantar Just you ‘n’ me, Beginnings y Make me smile. Toda balada que inspire un hermoso sentimiento me encanta”.

Chicago en concierto / Auditorio Telmex / Lunes 17 de enero, 21:00 horas / Boletos de 303 a mil 265 pesos en el sistema Ticketmaster

Por cierto

El gusto de Robert Lamm por la música latina es bien conocido. Tanto, que no descarta explorar el sonido mexicano en su próximo disco como solista, toda vez que ya se acercó al brasileño con The Bossa Project, placa que lanzó en 2008.

“Será pronto, pero antes queremos darle los toques finales al próximo disco de Chicago”, expresó el músico en entrevista.