Según estudio los consumidores se encuentran enojados por situación económica

CIUDAD DE MÉXICO.- Benjamín Otero, consultor de Marketing Profile, dijo que a pesar de que la crisis aún no toca el aspecto y el arreglo de los consumidores, se percibe enojo por la situación económica del país.

Según el estudio "Cambios en el mercado mexicano 2008", elaborado por la consultoría Nielsen, casi el 80% de los hogares mexicanos considera que su situación económica es "peor" y "mucho peor" en comparación con el año pasado.

A decir de especialistas, uno de los últimos rubros afectados en las temporadas difíciles es el arreglo personal de los consumidores, y los indicadores empiezan a reflejar una bajas en algunas categorías.

De acuerdo con la consultoría Nielsen, el año móvil 2008 contra el año móvil 2007, en el canasto de Higiene y Belleza reportó contracciones en algunas de sus categorías y en otras un leve crecimiento.

La categoría Protección Sanitaria reportó un ligero crecimiento de 4%; los Colorantes para el Cabello 3%; Shampoo 2%; Enjuagues y Acondicionadores 1%; Cremas Dentales 0%; Cepillos Dentales -1%; Pañuelos Faciales -2%; Pañuelos Desechables -5%, y Pilas y Baterías -7%.

Las categorías que reportan crecimientos más consistentes son Desodorantes, con 8%; los Antisépticos Bucales, con 6%; las Cremas para la Piel, con 6%, y el agua embotellada con 5%.

Los especialistas consideran que el clima de malas noticias procedentes de Estados Unidos, la detención de contrataciones por parte de los empresarios, así como el desempleo, son variables que han provocado que cierta parte de los consumidores se preocupen por su arreglo personal.

El especialista explicó que la caída en las categorías arriba mencionadas es estacional, debido a que gran parte de las familias aprovecharon las ofertas de mitad del año y en estos momentos los inventarios familiares están completos.

Sin embargo, la crisis de la economía aún no afecta la higiene de los consumidores, quienes, en todo caso, se perciben molestos y en desacuerdo con las malas noticias que se generan de la economía nacional.

Otero dijo que esta crisis es menos intensa que la de 1995.

En aquella época, la devaluación del peso, el alza inflacionario y de tasas de interés se dieron de la noche a la mañana, y de pronto se perdieron muchos empleos.

En esta ocasión las malas noticias aún están en el ambiente, pero los consumidores aún no perciben de lleno los impactos, aunque ello no impide que se encuentren molestos o frustrados por no tener (o encontrar) empleo o por no contar con el presupuesto suficiente.