Deuda, 54% de los ingresos de las entidades

CIUDAD DE MÉXICO (30/OCT/2012).- La deuda pública de las entidades representa en promedio 53.9% de sus ingresos propios, según el Instituto Mexicano para la Competitividad.

De una muestra de 29 entidades, Nayarit es la más comprometida en esa relación; sus pasivos equivalen a 725.5% de los recursos que genera con su recaudación tributaria y cobro de derechos.

A Nayarit le siguen Coahuila, con 118.7% de sus ingresos propios; Hidalgo, con 83.9%; Guanajuato, con 66.7%, y Baja California Sur con 57 por ciento.

En contraparte, los estados donde la deuda representa la menor proporción son Tlaxcala, San Luis Potosí, Chihuahua, Distrito Federal y Aguascalientes, con una participación de 0, 0.4, 2.6, 7.8 y 9.3%, respectivamente.

Querétaro, Tabasco y Sinaloa no presentaron la información necesaria para hacer el análisis, puesto que no contaban con un apartado definido en sus presupuestos para el pago de deuda.

Esta alta disparidad entre el endeudamiento y la generación de ingresos demuestra una dependencia “peligrosa” a las aportaciones federales para pagar los compromisos financieros que ha adquirido el estado y la verdadera capacidad de pago, comentaron especialistas.

El peligroso caso Nayarit

Según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la deuda de Nayarit durante el ejercicio del gobernador Ney González Sánchez pasó de 363 millones de pesos en el 2005 a 5,534 millones a septiembre del 2011, cuando dejó el poder; es decir, un aumento nominal de 1,424 por ciento.

En tanto, desde septiembre del 2011 a junio del 2012, Hacienda constata que la deuda nayarita reportada al gobierno federal aumentó 6%, ya con el nuevo gobierno de Roberto Sandoval, para sumar 5,900 millones.

A principios de este mes, el secretario estatal de Finanzas, Gerardo Siller Cárdenas, confirmó que el estado adeuda al menos 10,000 millones de pesos, luego de que se detectaron otros adeudos de la administración anterior a proveedores y otras instancias, los cuales aún no se suman a los datos del gobierno federal, mientras que se paga un servicio anual de deuda por 500 millones de pesos.

Consultado por El Economista, Carlos González Barragán, investigador asociado del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, comentó que Nayarit vive una situación severa, ya que además de ser un estado pequeño tiene poca capacidad institucional y económica para responder a una crisis financiera con un gobierno insolvente. Dijo que aunque ha habido un crecimiento importante en la actividad inmobiliaria en el norte del estado y en el municipio de Bahía de Banderas, la recaudación del Predial se mantiene a nivel municipal, por lo que de nada sirven esos potenciales ingresos extra.