El softbol se juega mejor con Gwen Stefani y un güiro

GUADALAJARA, JALISCO (20/OCT/2011).- Cuando los equipos calentaban, el sonido local programó “Hollaback girl”, un hit de Gwen Stefani y de inmediato algunas peloteras de Estados Unidos acompañaban sus lanzamientos con sus mejores pasos de antro dance.

Una aparente ventaja anímica para el equipo de las barras y las estrellas. Pero la programación musical tenía sorpresas y la canción que siguió fue una melodía cubana que prendió a las peloteras caribeñas.

El programador de la música se sintió DJ y alternó una canción de cada país.

Pero faltaba lo mejor. En su caseta, mientras alguna compañera bateaba, el resto de las cubanas improvisaba un timbal con una olla de aluminio y un güiro con la tapa de la hielera. La catcher era la voz principal y sus coequiperas un coro de nivel discográfico.

Así, lo de menos para los asistentes fue que Estados Unidos ganó 3-0 y sigue a la cabeza del softbol panamericano. El show fue completo.

Éxito de taquilla

Escondido en la Unidad López Mateos, el softbol es un mundo aparte de los Juegos Panamericanos.

Nadie pregunta en las taquillas por entradas para este deporte, pero tiene cupo lleno desde antes de que comenzaran los Panamericanos. Pocos medios se paran en el inmueble y sin embargo la gente que asiste sabe todo de la competencia.

EL DATO
Favoritas

Las escuadras de Estados Unidos y de Cuba son favoritas para llevarse el oro en softbol panamericano.

LA FIGURA
Marlen Bubaire

Impresionaba el obús del brazo derecho de la lanzadora cubana Marlen Bubaire, pero también la osadía de las bateadoras estadunidenses, que se colocaban cerca del plato para acortar la zona de strike, aún a costa de arriesgarse a un pelotazo de una bola del tamaño de una toronja, pero a más de noventa kilómetros por hora