De “bombero” a campeón

El director técnico del Santos de Torreón, Daniel Guzmán, se mostró feliz tras conquistar el título del Torneo de Clausura 2008 y ahora se ve como un técnico triunfador, luego de cinco años sufriendo con equipos que luchaban el descenso.

Tras el título conseguido la tarde de ayer, ahora “El Travieso” ya no se ve como un “bombero”, que llega a salvar a los equipos de la quema del descenso.

 Ahora el timonel mexicano se ve como un hombre que tiene la capacidad para luchar por títulos como un entrenador exitoso, pues siempre ha entregado buenos resultados a las instituciones en las que ha trabajado.

“Culminé esos cinco años de estar salvando equipos del descenso, ahora soy un técnico más maduro y somos campeones. Esto no se compara con nada, es hermoso.

“Soñaba con este momento, soñaba con dar la vuelta olímpica, con ver a los aficionados festejando, el recibir la copa y lo que se vive dentro del vestidor en la fiesta que ya empezó”.

Guzmán señaló que este título es justo para un equipo que sufrió, que mejoró con el paso del tiempo y que aprendió a ganar, luego de que el año pasado no pudieron coronar su gran juego con el título.

“El levantar la copa es una alegría impresionante, es algo hermoso luego de mucho esfuerzo, de muchas frustraciones, de muchas concentraciones y bien por Santos porque se merecía ser campeón.

“Ahora jugamos con más inteligencia, las liguillas se juegan aparte, no sirve de nada ser tan ofensivos y arriesgar atrás; encontramos el equilibrio, fuimos pacientes, prudentes, aprendimos el torneo pasado en la eliminación con Pumas”, dijo Guzmán.

Ludueña, el héroe

El delantero argentino del Santos, Daniel Ludueña, se convirtió en el héroe del equipo al marcar el gol con el que se consiguió el título del Torneo de Clausura 2008.

Un bello gol al minuto 16 de pierna derecha que se clavó en el ángulo superior izquierdo de la portería de Yosgart Gutiérrez, le dio su tercer título de Liga al conjunto de la Comarca Lagunera en el empate de 1-1 en la final de vuelta ante Cruz Azul.

Además de estar contento por ese gol que valió el campeonato, Ludueña se mostró feliz, porque pagó de la mejor manera la confianza a la directiva, el cuerpo técnico, aficionados y compañeros en un torneo en el que cerró con una lesión.

“Gracias a Dios, estoy muy contento, esto es gracias al trabajo, a la humildad que tiene este grupo, es un triunfo que Santos tanto ha buscado. Se logró el objetivo que queríamos y ahora a disfrutar.

“Me tocó anotar en un momento difícil, a pesar de estar mal de una pierna uno quiere estar darle un gol a toda esta gente, a mis compañeros, a la dirigencia que tanto nos han apoyado en un momento difícil en mi carrera”.

El artillero ahora sí puede festejar, luego de varias temporadas en las que siempre estuvo luchando por salvar equipos del descenso, primero con los Tecos de la UAG con los que llegó a una final, pero que perdió contra América, y luego con el propio Santos.

“No estoy en mi mejor momento, pero uno quiere estar siempre, gracias a Dios me tocó meter el gol, pero mis compañeros y el cuerpo técnico me dio una confianza bárbara”, señaló Ludueña.

El goleador argentino dedicó el título a un hermano que recientemente falleció.