Con ofertas en la mesa, Randy Moss se inclina por el retiro

MANKATO, ESTADOS UNIDOS (02/AGO/2011).- Randy Moss, uno de los jugadores más dotados y polémicos en la historia de la NFL, anunció su retiro de los emparrillados.

Su agente, Joel Segal, dijo este lunes que Moss tenía ofertas de varios equipos, pero que las había desechado y optado por el retiro. No dio detalles sobre las ofertas, limitándose a decir que su cliente simplemente había decidido que era hora de colgar las hombreras, el casco y los spikes a los 34 años.

“Randy analizó todas las opciones que tenía y decidió retirarse”, expresó Segal.

Si Moss se retira, se lleva consigo estadísticas impresionantes compiladas como receptor con los Vikingos de Minnesota, Raiders de Oakland, Patriotas de Nueva Inglaterra y Titanes de Tenneessee. Es segundo en la lista de máximos anotadores de la historia, con 153 touchdowns, empatado con Terrell Owens; quinto en total de yardas (14,858) y octavo en recepciones (954), igualado con Hines Ward. Esos números y su fama de ser el jugador más peligroso en la historia de la NFL en los pases largos, le garantizarían un lugar en el Salón de la Fama, en Canton, Ohio.

Sin embargo, su elección al recinto de los inmortales podría verse obstruida por su comportamiento a veces irritante y algunas actitudes alocadas, como la de abandonar a su equipo en pleno partido.

En los últimos años, cambió de equipo varias veces. La temporada pasada cambió dos veces de equipo, pasando de los Patriotas a Vikingos (en una segunda etapa) y luego a Titanes de Tennessee.

Tuvo siete años espectaculares con Vikingos y luego pasó dos temporadas para el olvido en Oakland. Volvió con todo con Patriotas en 2007 y fijó un récord de 23 touchdowns en un año, ayudando a que Nueva Inglaterra llegase al Super Bowl de forma invicta.

En octubre del año pasado fue enviado de vuelta a Vikingos, pero no duró mucho allí. El entrenador en jefe Brad Childress se hartó de sus desplantes y lo dio de baja en noviembre, en una actitud sorprendente con un jugador de su cartel, que probablemente le haya costado el puesto algunas semanas después.En Tenneessee jugó ocho partidos y no se hizo notar.

A lo largo de su carrera, Moss se dio a conocer como uno de los jugadores más peligrosos de la NFL....cuando quería. Rara vez se dio un jugador con su tamaño, su velocidad y su inteligencia.

Pero siempre tuvo problemas de conducta dentro y fuera del terreno. Una vez empujó a un policía de tránsito, roció con agua a un árbitro durante un juego y otra vez se fue del terreno de juego, abandonando a su equipo.

El principio del fin se produjo probablemente en su retorno a los Vikingos el año pasado. Se peleó con el entrenador, se subió a un podio a elogiar a Patriotas y a criticar a Vikingos y anunciar que él se entrevistaría a sí mismo y no los periodistas.

PERFIL
Moss vivió vidas opuestas

Randy Moss vivió una vida en el mundo del futbol americano totalmente contraria a lo que fue su infancia.
Como muchos de los jugadores profesionales en Estados Unidos, de la NFL, las Grandes Ligas y la NBA, Randy Gene Moss (nacido el 13 de febrero de 1977 en Virginia, EU) careció de una figura paternal, y su madre, Maxine, al igual que muchas, peleó como madre soltera para que sus tres hijos tuvieran comida en la mesa.

Maxine trabajaba como enfermera, pero también cuidaba con entereza la salud y alma de sus hijos. A Randy le ordenaba asistir por lo menos tres veces a la semana a rezar a la iglesia de su pueblo natal, Rand, en el Oeste de Virginia. Además, Maxine tenía estrictamente prohibidas las malas palabras y el consumo de alcohol en su casa.

Este receptor abierto vivió una infancia como un niño bien portado, con una buena educación, siguiendo el ejemplo de su hermano mayor Eric, quien era un disciplinado atleta y jugador de futbol americano.

Randy, además de ayudar a cargarle su equipamiento de futbol americano a su hermano, alimentaba su sueño de seguir sus pasos y convertirse en jugador profesional de futbol americano en la NFL.

Sin embargo, apenas salió de su casa, y al parecer un nuevo Randy Moss nació, una nueva personalidad se apoderó de él.

Rand era un pueblo pequeño, con la minería como recurso principal de empleo, por lo que había pocas oportunidades y poco con qué soñar para los jóvenes. Moss se fue de su pueblo, y con él se fueron sus demonios internos que fue sacando.

Casi al finalizar la preparatoria, la universidad de Notre Dame lo becó para que jugara con el Fighting Irish, pero sin ni siquiera pisar las instalaciones de la privilegiada universidad, Randy se vio inmiscuido en una fuerte pelea en su preparatoria, en Dupont, Virginia. Ese suceso llegó hasta Notre Dame, lo privaron de la beca y lo expulsaron.

Moss comenzó estudiando la carrera en la Universidad Estatal de Florida, donde ahí también lo becaron. Pero mientras hacía un servicio comunitario por la pelea, lo sometieron a una prueba antidopaje en la universidad y dio positivo por mariguana. Una vez más, le retiraron la beca y fue nuevamente expulsado.

Pero Randy Moss es la prueba fiel de que todos merecemos otra oportunidad. La Universidad de Marshall, con un bajo perfil en el Futbol Americano, le abrió sus puertas y el jugador no los defraudó. Randy Moss hizo grande a su alma máter, estableciendo múltiples récords y ganando campeonatos.

En su tercer año como universitario decidió acudir al Draft de la NFL, donde los Vikingos lo seleccionaron.
Los problemas de Randy Moss continuaron ya como profesional, pero rara vez dentro de los emparrillados. Broncas con rivales, desplantes, insultos, posesión de mariguana, problemas maritales, del jugador era material puro para los medios de comunicación.

Sin embargo, las autoridades sabían que Moss tenía un lado positivo y benefactor, ya que en secreto y sin que nadie, ni los medios de comunicación, se enteraran, acudía con niños desamparados, les llevaba de comer y les daba dinero, es por eso que sus días de condena por posesión de mariguana se reducían a servicios comunitarios.

Tal vez Randy Moss es una persona polémica en la extensión de la palabra, tanto que los medios estadounidenses dudan que su retiro es definitivo. Pero por increíble que parezca, jugadores, compañeros y rivales, y entrenadores reconocen a Moss más por su incomparable talento como receptor abierto, que como un desadaptado social.