Campeón en problemas

NUEVA YORK.- Jeremy Shockey, ala cerrada de los Gigantes de Nueva York, se ha enfrascado en una lucha verbal con el gerente del conjunto campeón de la NFL, provocando con ello su posible salida del equipo.

En los últimos días dos de las figuras de los Gigantes, Plaxico Burress y Jeremy Shockey, han mostrado su disgusto al no recibir una extensión de contrato con el equipo, luego de haber conquistado el Super Bowl XLII.

Shockey hizo declaraciones en contra de Jerry Reese, gerente del equipo, con respecto a los rumores de su posible negociación y que pudo haber marcado con sus palabras su adelanto para dejar el equipo.

Durante la pasada agencia libre, los Santos de Nueva Orleans y los Bucaneros de Tampa Bay mostraron interés en el gigantesco ala cerrada, quien por una lesión en la rodilla no pudo jugar en la dramática victoria de los Gigantes sobre los Patriotas de Nueva Inglaterra por 17-14, aunque sí acompañó al equipo en Phoenix, pero no en el desfile donde festejaron.

Incluso durante las prácticas que realizó Nueva York este fin de semana, fueron utilizados en el primer equipo los alas cerradas Kevin Boss y Darcy Johnson, quienes ocuparon el puesto de Shockey durante la campaña anterior.

Al menos, Tom Coughlin, entrenador en jefe, siente que no es una situación acerca de la cual se deba exagerar.

“Desde donde yo lo veo, sí hay una situación complicada, pero no es algo que le impida trabajar a Shockey”, afirmó Coughlin.

La labor de Boss y Johnson también puede influir en la decisión de la directiva de negociar a Shockey, pues saben perfectamente que tienen esta posición cubierta en caso de dejar en libertad al egresado de la Universidad de Miami.

Desde que llegó a Nueva York en la primera ronda del Draft Colegial del 2002, Shockey maravilló a todos con su poder físico y sus hábiles manos para atrapar pases, pero también por su facilidad para hacer declaraciones que ponen en aprietos a los directivos.

Hace unas campañas, Shockey realizó declaraciones en contra del quarterback Eli Manning, y ahora fue más lejos al hablar de un alto mando, poniendo en riesgo su permanencia en el equipo, luego de siete años en los que ha sumado cuatro mil 228 yardas y 27 touchdowns, que lo convierten en uno de los mejores de su posición en la NFL.

Kevin Gilbride, coordinador ofensivo de los Gigantes, comentó que él busca enfocarse en los jugadores que están participando en las prácticas, y no en aquellos que optan por ausentarse.

“Él ha estado en nuestras juntas, está atento a todo lo que ocurre, y creo que se está haciendo una bola de nieve con la situación entre la gerencia y el jugador”.