Nuevo rostro a mascarones mayas

QUINTANA ROO (01/MAY/2010).- Los seis mascarones de estuco de la Zona Arqueológica de Chakanbakán, en el Sur de Quintana Roo, considerados entre los más antiguos del área maya, serán restaurados por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia ( INAH).

Investigadores informaron que las piezas tienen una antigüedad de más de dos mil 300 años. Estas esculturas tienen reminiscencias de la cultura olmeca, al representar el rostro de deidades con características de jaguar.

Las labores de atención de los mascarones elaborados en estuco, lodo y piedra están a cargo de Gerardo Calderón, especialista de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH. En el proyecto también participa el arqueólogo Fernando Cortés, responsable de las exploraciones en Chakanbakán.
“En la primera semana de mayo vendrá un equipo de restauradores que hará una limpieza integral, además, resanarán y repondrán algunas pequeñas partes faltantes, así como su consolidación”, informó Cortés.

El investigador indicó que estos mascarones fueron hallados hace 15 años en los costados de la escalinata del templo piramidal más importante de este sitio prehispánico, conocido como Nohochbalam.

Se estima que estas esculturas fueron hechas hacia el año 350 antes de Cristo, “lo que les confiere importancia a estos mascarones, ya que fueron el antecedente de los encontrados en otros sitios del área maya”.

Estas piezas tienen gran influencia olmeca. “Al verlas parece que se están viendo unas cabezas olmecas pero con elementos mayas, esto quiere decir que la civilización maya adoptó elementos de este ancestral grupo y de esta manera pudieron desarrollar una iconografía propia, tal y como la vemos actualmente”.

Algo peculiar de estas obras, puntualizó el arqueólogo Cortés, es que a pesar del gran parecido que a simple vista guardan los mascarones con las cabezas olmecas, a los lados tienen una decoración netamente maya.