Mareo, dolor de cabeza, fatiga, náusea, irritabilidad, depresión, sensibilidad a la luz y al sonido son sólo algunas de las muchas y desagradables señales de la resaca, también conocida como "cruda".Estos síntomas son producto de la deshidratación, alteraciones hormonales y celulares, además de los efectos tóxicos del etanol en sangre. Por lo general, se manifiestan después de beber mucho alcohol, aunque hay personas que con un par de tragos experimentan malestar o, por el contrario, quienes no conocen qué es una resaca pese a que beban mucho. Si bien el mejor remedio para evitar sentirse mal después de una noche de copas se llama moderación, hay algunos consejos que pueden aminorar tu vía crucis.