Es posible que ante la contingencia y el aislamiento domiciliario nos sintamos impotentes o limitados por no poder ayudar directamente a los trabajadores de la salud, por ejemplo, que están en la primera línea de lucha por evitar la propagación del COVID-19, sin embargo, existen proyectos sociales e iniciativas personales con las que se puede ayudar a otros sectores que también están viviendo momentos complicados.Ekatherine Acosta, jefa del Departamento de Compromiso Social de la Universidad Panamericana (UP) de Guadalajara, explica que ante las dificultades económicas que se presentan por el cierre o pausa de distintos ejes laborales, es importante identificar a esos sectores más vulnerables que paulatinamente impactan al hogar de cada persona.“Los sectores vulnerables son las personas que pueden ser más propensas a adquirir el COVID-19, como adultos mayores o con algunas enfermedades; también aquellas que no tienen un trabajo fijo, están desempleadas o que dependen de sus ventas al día, así como personas que carecen de alimentos, de vivienda, y también pequeñas empresas que se ven afectadas en sus negocios porque no estamos circulando como habitualmente”.Señala que la solidaridad tiene diversas formas de manifestación, y pese a que quizá nuestras condiciones económicas sean limitadas, acciones sencillas como llamadas por teléfono y estar al pendiente y cuidado de familiares, amigos o conocidos, puede ser el inicio para sumarnos a otros proyectos en los que también se puede colaborar no solo con dinero, pues el tiempo, asesoría de temas que dominamos y hasta nuestro uso de redes sociales, pueden ser claves para reducir el impacto económico.“Esto es un proyecto colectivo, es un momento en el que todos debemos estar en el mismo canal, apoyándonos, es una realidad mundial, pero en la que podemos apoyar a la familia, amigos, al vecino, al prójimo. Es un compromiso en cada uno de nosotros. Preguntarnos qué vamos hacer, cómo sumarnos”.Ekatherine Acosta detalla que los sectores vulnerables son variados y con necesidades particulares, desde aquellas personas, adultas mayores que presentan complicaciones para surtir enseres básicos para su aislamiento, hasta pequeñas empresas o asociaciones civiles que tratan de mantenerse de pie promoviendo sus servicios y productos hechos desde lo local.1.- Identifica cuáles artículos puedes donar desde tu casa. Puede ser ropa y calzado que ya no utilizas, pero que están en buen estado e higiene. Consulta a tus familiares si requieren de algún producto que puedas compartir gratuitamente.2.- Establece comunicación con los adultos mayores de tu entorno familiar, social y hasta vecinal, ya que al ser ellos un sector de riesgo ante la pandemia, pueden tener dificultad para trasladarse al mercado, además de que ellos son prioridad para preservar la cuarentena.3.- Explica a tus familiares y conocidos el contexto de la situación sanitaria con información oficial y verificada. Investiga si alguien cercano a ti esta en condición solitaria y bríndale seguimiento con llamadas y mensajes, y postúlate como candidato para ayudarlos en caso de urgencia.4.- Acércate a las asociaciones civiles, albergues, casas hogar y estancias de adultos mayores para conocer sus necesidades, si presentan complicaciones económicas ante el recorte o suspensión de donativos, si puedes ayudar como voluntario desde casa o presencialmente (con las medidas higiénicas recomendadas).5.- Procura adquirir productos y alimentos de comercios vecinos. Sé sensible y comprensible con los repartidores de productos básicos. Con las medidas de higiene pertinentes, puedes ofrecerles una bebida refrescante y/o darles una propia extra, por ejemplo.6.- Infórmate sobre los proyectos colectivos de tu colonia o temas que sean de tu interés en los que puedas participar desde lo virtual haciendo plataformas de donativos económicos para beneficiar a sectores vulnerables o ayudar, por ejemplo, a los hospitales y sus trabajadores en la compra de insumos médicos.7.- Si eres comerciante, pues ayudar brindando un precio justo de tus productos y servicios a los sectores más vulnerables y a quienes siguen saliendo a trabajar para brindar actividades esenciales. Suma a tu negocio a otros emprendedores locales.8.- Las redes sociales son básicas para difundir proyectos sociales, plataformas de recaudación o historias que requieran de ayuda inmediata. Un click y un compartido pueden ser gran utilidad desde tus cuentas personales.9.- Puedes armar despensas de alimentos y productos básicos para personas que están en situación de calle.10.- Si eres psicólogo, coach o tienes manejo de emociones, puedes brindar asesorías virtuales a quienes están presentado ansiedad y frustración por el aislamiento e incertidumbre laboral, social y familiar. Comparte consejos, ejercicios, lecturas o actividades que ayuden a tranquilizar, especialmente para personas que están solas. JL
