En diferentes partes del país se han implementado estrategias y sanciones por no cumplir las medidas sanitarias básicas contra el COVID-19, sobre todo en comercios. Algunas de las obligaciones son el uso del cubrebocas, el respeto al aforo permitido, filtros con gel antibacterial y toma de temperatura al ingreso, entre otras. Sin embargo, también hay otros puntos de México donde se arresta a los ciudadanos por incumplir con estas medidas preventivas.En el Estado de México hay tres municipios donde es obligatorio el uso del cubrebocas: Toluca, Cuautitlán y Ecatepec.Cuautitlán aprobó esta semana un arresto de seis horas y aplicar multas hasta por 481 pesos a quien no use cubrebocas, cuyo uso es obligatorio en espacios públicos a partir de este 24 de enero en este municipio mexiquense.El alcalde de ese municipio, Aldo Ledezma, señaló que en caso de no usar cubrebocas se dará una sanción administrativa de seis horas de arresto, la cual podrá ser conmutable.Las sanciones también son para los propietarios de negocios cuyos empleados no utilicen esta protección y gel antibacterial dentro de sus comercios.Debido al repunte de casos de COVID causados por la variante ómicron, el Ayuntamiento de Ecatepec, encabezado por el alcalde morenista Fernando Vilchis, estableció como obligatorio el uso de cubrebocas a partir del 14 de enero en espacios públicos.En ese lugar los ciudadanos también son detenidos y cerca de dos mil han sido conminados a usarlo de forma correcta.La Policía de Toluca también obliga al uso de cubrebocas en espacios públicos, señaló el actual alcalde Raymundo Martínez Carbajal, quien argumentó que es una medida útil para bajar los contagios, pero en la capital mexiquense no hay sanciones por no usarlo.En Jalisco, en 2020 el Gobierno solicitó el uso del cubrebocas en espacios públicos y en comercios. En junio, policías del municipio de Ixtlahuacán de los Membrillos detuvieron a un joven, llamado Giovanni López supuestamente por no portar el cubrebocas.Un video de su detención se hizo viral cuando se dio a conocer que el joven murió a manos de los policías municipales, lo que indignó a ciudadanos del Estado y se generaron protestas para pedir justicia por la muerte de Giovanni.Luego de ese hecho, el gobernador de Jalisco señaló que el uso del cubrebocas era una responsabilidad social y negó que fuera algo obligatorio.
