En rueda de prensa, el fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, confirmó que los cuatro cuerpos hallados en los municipios de Tonalá y Tlaquepaque el pasado 7 de noviembre eran policías estatales.Indicó que los cuatro hombres laboraron para la Secretaría de Seguridad Pública, y que algunos habían formado parte de comisarías municipales, sin confirmar si se hallaban activos en ellas o no al momento de su asesinato.Se trata de Otoniel González, Arturo Sánchez, Edwin González y Alejandro, quienes causaron baja de Policía Estatal desde el año 2019. Sus cuerpos fueron hallados el pasado martes en El Tempisque, Tlaquepaque y en una brecha cercana al Camino a El Vado. Las víctimas, aseguró el fiscal, ya fueron reconocidas por sus familiares.“Por las circunstancias propias del hecho, de parte de los investigadores es evidente una línea de investigación que relaciona el hecho con delincuencia organizada. Referir que en la medida en que esta hipótesis se vaya confirmando formará parte de la línea de investigación principal”, expresó Solís Gómez.Otoniel González, una de estas víctimas, se había desempeñado como escolta del ex gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, y tenía señalamientos por violaciones a los derechos humanos.Según señaló el fiscal, la información respecto de la posible relación laboral con el exmandatario ya fue solicitada a las autoridades correspondientes para añadir lo que se requiera a las indagatorias. También se solicitó la información sobre la trayectoria de los cuatro ex policías.“Se cuentan con algunos datos que pudieran presumiblemente relacionarlos con algunas carpetas (de investigación), desde luego tienen conocimiento las áreas que están investigando el hecho y trabajarán de manera conjunta para afinar los detalles que nos lleven al esclarecimiento de los hechos”, expresó Solís Gómez. Entre ellas, se encuentra la probable relación de Otoniel en la privación de la libertad de un abarrotero el año pasado.GC
