Bajo los argumentos de que se tendrá una gasolina de mejor calidad, con menos emisiones contaminantes, y más barata; además de que se promoverá la inversión en biorefinerías y producción de caña de azúcar, se pedirá a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) derribar la prohibición de vender gasolina con máximo de 10% de etanol en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).De acuerdo a Pablo González Casanova, presidente de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (AMEGAS), la modificación de la Norma Oficial Mexicana NOM-016-CRE-2016 disminuirá el precio del litro de combustible. “Si utilizamos una parte de etanol en la composición de las gasolinas, va a bajar el producto cerca de dos pesos por litro”.Actualmente, el precio de la gasolina Magna en Jalisco es de 16.57 pesos, la gasolina Premium vale 18.53 pesos y el diésel cuesta 17.25 pesos, con la expectativa de cómo se moverán los precios a partir de su liberalización a los vaivenes del mercado, proyectado para fin de mes. Sin embargo, el precio de la gasolina con etanol en Estados Unidos es de 8 pesos el litro.Mónica Almeida, diputada, impulsora de la iniciativa, y representante del Congreso ante la CRE, aseguró que la modificación de la ley permitiría promover inversiones en producción de etanol en Jalisco. Actualmente, se producen 30 mil litros diarios de etanol en el estado, pero se requieren 1 millón de litros para abastecer la demanda de combustible de sus habitantes.Igualmente, Almeida mencionó que Jalisco cuenta con 30 mil hectáreas para cultivo de caña de azúcar (principal fuente de producción de etanol), principalmente en la zona de Tomatlán. Sin embargo, se necesitan 20 mil más para que inversionistas locales tengan las condiciones para inviertir biorefinerías de etanol.“Hay que impulsar que, en Jalisco, los productores mexicanos podamos tener alternativas para producir y consumir energías limpias, más económicas y que nos permitan combatir problemáticas de calidad del aire y de salud pública”, dijo la legisladora.“Estamos desperdiciando una oportunidad de que, analizando el precio de las gasolinas (partiendo de la base biocombustibles igual a precios más bajos), podamos generar riqueza al estado a través de la producción de biocombustibles”, complementó.En junio de 2017, se modificó la NOM-016-CRE-2016 para permitir la adición de hasta un 10% de etanol anhidro como oxigenante en gasolinas Magna y Premium en todo el país. Sin embargo, la reforma no aplicó en la Zona Metropolitana de Guadalajara, la Zona Metropolitana de Monterrey, y la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM).La iniciativa es encabezada por el Congreso y la Agencia de Energía del estado de Jalisco, y engloba opiniones de académicos, organismos de gobierno, asociaciones civiles, entre otros. Se presentó en la CRE el 30 de octubre, y este 14 de noviembre Almeida y otros impulsores de la reforma viajarán a Ciudad de México y Monterrey para promover la derogación de la norma.El uso de etanol como oxigenante en los combustibles de la Zona Metropolitana de Guadalajara, permitiría que gran parte de los de 2 millones de autómoviles que compone el parque vehicular de la ciudad, reciban gasolina sin Metil Terbutil Eter (MTBE) y otros cancerígenos.“Para la salud, es menos nocivo el etanol que el combustible fósil, que tiene 156 componentes, y cinco de ellos son cancerígenos”, señaló Pablo González, presidente de AMEGAS.Si se aprueba la petición a la CRE, González estima que de los 15 millones de litros diarios de gasolina regular, Premium y Diésel que se venden en Jalisco, 10 millones dejarán de tener MTBE, componente que será sustituido por el etanol anhidro.La adopción del etanol en los combustibles no provocan contaminación del aire, tal y como señalan expertos y organismos medioambientales, señaló Georgina Sandoval, investigadora del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (CIATEJ).“El problema es que el 90 o 95% de gasolina o diésel, no el 10% del etanol”, explicó la académica. “Hay que tener mejor calidad de combustibles fósiles, y posteriormente, irlos reduciendo gradualmente”.Valentina Davydova, investigadora del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Guadalajara, expresó que al año, 3.7 millones de personas mueren por la contaminación del aire, y en México, es una de las diez principales causas de enfermedad y mortandad, por lo que los biocombustibles son una opción para reducir este problema.
