El Gobierno mexicano indicó que el número de paisanos fallecidos tras el ataque que se registró el sábado en un centro comercial en El Paso, Texas, subió de tres a siete.Ante este hecho, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubón, advirtió que estudia la posibilidad de denunciar por “terrorismo contra mexicanos en Estados Unidos (EU)” al autor del ataque, así como pedir una solicitud de extradición.“Será una valoración que tendrá a su cargo la Fiscalía General de la República (FGR) de solicitar, si hay los elementos necesarios, la extradición del autor o los autores de este hecho. Que nadie se extrañe porque para México este individuo es un terrorista”, señaló Ebrard.El funcionario federal anunció que también emprenderá acciones legales contra el responsable de la venta del arma usada durante el asalto “para ver cómo se vendió” y conocer si el vendedor conocía las intenciones del autor del ataque.Ebrard Casaubón detalló que sería la primera demanda de esa naturaleza en la historia, con la intención de que México tenga acceso a toda la información que surja de los hechos y pueda valorar si hay otros individuos involucrados que pongan en riesgo la vida de paisanos en la nación vecina.En los últimos ocho días han ocurrido cinco ataques con armas de fuego en cuatro diferentes entidades de Estados Unidos, los cuales han dejado hasta el momento al menos 34 muertos y 64 heridos.El más reciente fue el de ayer, con saldo de nueve personas jóvenes lesionadas en dos eventos de violencia en Chicago. En el primero, un hombre a bordo de un vehículo Chevrolet Camaro accionó su arma contra ellas en Douglas Park, reportó la Policía de Chicago.Algunas versiones indican que la agresión ocurrió contra tres mujeres y cuatro hombres. Uno de ellos presentaba una herida de bala en la ingle y su estado de salud se reporta como crítico. Poco más de una hora después se escucharon nuevas detonaciones en la cercana calle de South Troy, donde las fallecidas fueron dos mujeres.También la madrugada de ayer al menos nueve personas perdieron la vida y otras 16 resultaron heridas en Dayton, Ohio, en un incidente aún por determinar por las autoridades.El sábado, en un centro comercial de El Paso, Texas, 20 personas murieron y 26 resultaron heridas, en lo que ya es considerado uno de los días más mortales en la historia de ese estado.En tanto, el pasado domingo se registró un tiroteo en el Festival del Ajo, en Gilroy, California, en donde el atacante fue abatido por la Policía, luego de asesinar a tres personas y causar heridas a otras 15.Los incidentes mortales a cientos de kilómetros de distancia uno del otro (Ohio, Texas, California e Illinois) van a reavivar el debate sobre el control de armas de Estados Unidos.Estados Unidos investiga el ataque en El Paso como un caso de “terrorismo doméstico y delito de odio”, por los supuestos vínculos del tirador con un manifiesto en el que se critica “la invasión hispana de Texas”.“Estamos tratando esto como un caso de terrorismo doméstico, y vamos a hacer lo que hacemos a los terroristas en este país, que es ofrecer una justicia rápida y segura”, indicó John Bash, fiscal federal para el distrito Oeste de Texas.Por su parte, el fiscal del distrito de El Paso, Jaime Esparza, anunció que buscará la “pena capital” para el acusado, Patrick Crusius.Además, Pete Buttigieg, candidato demócrata, acuso al “terrorismo blanco” como una de las consecuencias de la retórica nacionalista. “Las vidas perdidas en Charleston, San Diego, Pittsburgh y El Paso, son las consecuencias del terrorismo nacionalista blanco”.
