Un duro inicio de año están teniendo los rojinegros del Atlas, pues han perdido tres partidos en forma consecutiva, dos en Liga y uno en Copa, luciendo endebles atrás e inoperantes de medio campo hacia adelante, por lo que la salida del “Profe” Cruz tomando su lugar Gerardo Espinosa, de forma interina, era necesaria a juicio de la dirigencia rojinegra. Se filtró que Javier Torrente, quien ya dirigió al León, llegará para hacerse cargo del equipo rojinegro para buscar salvarlo del descenso. Torrente ya hizo esa labor en León, pero luego fue despedido por no poder continuar con buenos resultados, pero su inicio fue magnífico.Y aunque La Fiel parece tener desde la temporada pasada en José Guadalupe Cruz al único responsable del mal momento rojinegro, la realidad es que el grado de responsabilidad de la crisis atlista abarca desde jugadores, cuerpo técnico y directivos, pues los encargados de la planeación y diagnosticar lo que requería el equipo, no atinaron al dejar ir elementos cuya ausencia para esta temporada debilitó al grupo, son los casos de Matías Alustiza brillando en Pumas y José Antonio Madueña y Luis Salas ahora en Cruz Azul, así como Martín Barragán y Fidel Martínez, que fue al Peñarol de Uruguay.Tampoco entiendo la llegada de un arquero extranjero, Cristopher Toselli, teniendo un guardameta mexicano confiable como Miguel Ángel Fraga y pudiendo utilizar esa plaza de foráneo en otra demarcación del campo donde parece hacer más falta al equipo contar con elementos de calidad.En la media cancha ni Clifford Aboagye, ni el inglés Ravel Morrison han sido constantes en su desempeño, aunque han tenido destellos como el golazo del británico el pasado domingo ante los Pumas.Adelante ya sin Matías Alustiza y tampoco la opción de Jair Barraza y Martín Barragán, la ofensiva depende de lo que puedan aportar el joven canterano Brayan Garnica y el voluntarioso argentino Milton Caraglio, que no han podido hacer en conjunto más que un solo gol, el de Garnica frente al León en la primera fecha, el otro que llevan fue el de Morrison ante Pumas el pasado domingo, siendo castigados con siete goles en tres partidos, dos de Liga y otro en la Copa, el panorama luce complicado para los rojinegros pues están amenazados por el descenso donde sólo superan en la tabla de cocientes a dos equipos: Veracruz que es el último y el Querétaro que es el penúltimo, y con ellos tendrá que pelear fuertemente por mantener la categoría, cuya definición la tendremos al terminar el presente Clausura 2018. Cuidado con eso, pues la presión crecerá si no llegan los buenos resultados y los otros equipos involucrados por ahí los aprietan obteniendo un par de resultados positivos. Hasta el momento de los tres más involucrados en la lucha por no descender, el Querétaro de Luis Fernando Tena es el que ha lucido mejor, mientras Atlas y Veracruz han lucido mal en este inicio de campaña.Habrá que esperar un poco para ver si con la salida de José Guadalupe Cruz y la llegada de un técnico interno inexperto, pero surgido de la cantera como Gerardo Espinoza, le da a los rojinegros otra cara en lo que llega Torrente o quien resulte elegido finalmente, y un mejor funcionamiento que los lleve a sacar los resultados necesarios para mejorar y evitar el descenso. A priori parece muy temprano, apenas en la Fecha 2, para tomar esta drástica decisión, pero sólo el tiempo nos dirá si la decisión de la dirigencia rojinegra fue acertada o no.
