Viernes, 29 de Marzo 2024
Ideas |

Histórico, el viraje total a la izquierda

Por: Daniel Rodríguez

Histórico, el viraje total a la izquierda

Histórico, el viraje total a la izquierda

Hoy puede ser un día histórico para América Latina. La jornada electoral dominical en Brasil es determinante, porque si Luis Ignacio Lula da Silva gana la presidencia, por primera vez en la historia las seis economías más fuertes de Latinoamérica estarían gobernadas por gobiernos de izquierda.

Todas las encuestas en Brasil señalan que Lula -quien busca su tercer mandato en el gigante sudamericano- tiene ventaja de un promedio de 15 puntos sobre el presidente Jair Bolsonaro, quien busca la reelección, y se convertirá en el nuevo presidente a partir del 1 de enero del 2023.

En la actualidad los movimientos políticos izquierdistas -todos fundamentados en el populismo y diferentes en sus planteamientos y procesos- y que se pueden considerar economías fortalecidas están posesionados en México (Andrés Manuel López Obrador), Colombia (Gustavo Petro), Argentina (Alberto Fernández), Chile (Gabriel Boric) y Perú (Pedro Castillo) y en menor escala de valores económicos nos encontramos con Venezuela, Nicaragua, Bolivia y Honduras. La nueva llegada al poder de Lula cerraría el círculo de poder económico y casi 560 millones de habitantes de América Latina estarían gobernados bajo el conjunto de doctrinas, ideologías, corriente y movimientos políticos basados en la idea de la igualdad social, donde la propuesta es que hay que proteger a los más desfavorecidos con miras a lograr un sano equilibrio comunitario. Sin embargo, la actualidad por la que atraviesa el mundo ha truncado muchos proyectos por las condiciones económicas adversas que se tienen, por lo que la consolidación de izquierdas en las potencias comerciales de América Latina, no garantizan que se logre un provecho sustancial con ese movimiento en el poder como pudiera suponer la teoría.

En el caso concreto de Brasil, aunque la ventaja de Lula en la preferencia es considerable y casi determinante, no se puede descartar que no consiga el 50 por ciento más 1 para ganar la elección y que se tenga que ir a una segunda vuelta que estaría programada para el 30 de octubre. Y el riesgo más preocupante -ganando hoy o en la segunda vuelta- son los fantasmas que aparecen en el horizonte, por las constantes advertencias del presidente Bolsonaro, quien ha polarizado a la población y pregonado muy frecuentemente que “no hay las debidas garantías” para la elección y posiblemente no estaría dispuesto a reconocer los resultados si surgen algunas dudas en el proceso electoral, lo que ha tensado y enrarecido el ambiente social y político del país amazónico.

Brasil estaría en la antesala de vivir un proceso como el que México vivió en el 2006, cuando López Obrador no reconoció la victoria de Felipe Calderón, o bien lo que Estados Unidos sucedió en el 2018, cuando Donald Trump no quiso aceptar su derrota electoral ante el ahora presidente Joe Biden.

De acuerdo con los observadores internacionales, solo una sorpresa enorme cambiaría lo que las encuestas muestran, que Lula regresará para un tercer periodo y que históricamente por primera vez las seis potencias comerciales de América Latina estarán administradas por la izquierda. Pero en el ‘inter’, durante el proceso electoral y la certificación de un ganador, Brasil pudiera vivir un conflicto social con severos riesgos. ¿Usted, qué opina?.

daniel.rodriguez@dbhub.net

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones