Desde que Cynthia Cantero tiró el arpa en el Instituto de Transparencia (Itei) para irse de contralora de Guadalajara, la institución sólo ha dado noticia por el retraso en su trabajo y porque ya empiezan a escucharse las patadas bajo la mesa en el proceso para nombrar a una nueva integrante, que encabezará la próxima presidencia del organismo.Esa tarea es facultad de los diputados del Congreso de Jalisco, que apenas empiezan las negociaciones para emitir una convocatoria que satisfaga algunos intereses cupulares.Mientras eso sucede, el comisionado Salvador Romero Espinosa, que se quedó como “encargado del changarro”, trata de rescatar algo de lo perdido y, por lo pronto, busca reflectores para volver a poner en el interés de la gente el tema de la transparencia.Ahora sí que el Itei está como los cangrejos: dos pasos para adelante y 100 para atrás.El Partido Movimiento Ciudadano en Jalisco niega que existan divisiones o grupos enfrentados, y mucho menos que el dirigente nacional Dante Delgado jale para un lado y el gobernador para otro.Para demostrarlo, el líder estatal Manuel Romo presumió que viajó a Aguascalientes para acompañar en su presentación a la candidata de MC a la gubernatura, Anayeli Muñoz, “por la influencia y el peso de Jalisco” en el Occidente del país, y con el respaldo del presidente Dante Delgado.Lo más probable es que Movimiento Ciudadano no gane nada en el Estado hidrocálido, pero eso sí, quieren remarcar que hay mucha unidad.César Íñiguez, el dirigente del sindicato de trabajadores del Congreso del Estado, está contra la pared.Por un lado, está apalabrado con algunos de los diputados coordinadores en el Poder Legislativo, y a cambio de no se sabe qué, apoyó la reforma para que se legislara sobre el servicio civil de carrera. Pero, los que no lo pueden ver ni en pintura son los trabajadores de base del Congreso, a quienes representa como dirigente sindical, y que están totalmente en contra de la nueva legislación. Aseguran que está malhecha y atenta contra los derechos ganados por los empleados de base.Ni modo. El líder sindical que eligieron les salió muy convenenciero y ahora hay diferentes grupos de trabajadores que están preparando su estrategia para tumbarle a los diputados la famosa reforma del servicio civil, en tribunales.
