La inteligencia artificial (IA) representa un cambio en la sociedad por todas las implicaciones que ésta conlleva; genera debates acalorados entre su uso ético y cómo es capaz de desplazar la labor y la creatividad humana por resultados inmediatos que en ocasiones parecen más reales que la realidad misma.Sin duda, la IA seguirá generando cuestionamientos mientras se desarrolle, perfeccione, y crezca a territorios nuevos. De hecho, la IA también ha trastocado las esferas del arte, diluyendo y desdibujando el mismo concepto de lo que es el arte, la inspiración y el alma.No obstante, el artista tapatío Rodo Morfín, en vez de ver estos avances tecnológicos como un desafío o un obstáculo que ponga en peligro su quehacer artístico, se los apropió para explorar y expandir su creatividad, concibiendo así la exposición “Diversilandia”, en la que juega con los procesos de la IA para llevarlos a su propio proceso como artista.En entrevista con EL INFORMADOR, el artista tapatío, nacido en 1980, compartió este peculiar proceso artístico que lo llevó a llevar su inspiración al terreno de la IA.“‘Diversilandia’ es una exposición de 50 retratos digitales generados con inteligencia artificial. Soy un artista digital con 25 años de trayectoria”, señaló el artista de 45 años.“Tengo especialidad en el tema de creación de imágenes; la llegada de la IA fue una herramienta muy revolucionaria para el sector de industrias creativas… se ha vuelto una herramienta muy poderosa para poder crear. Es decir, lo que antes nos costaba meses hacer una imagen, con la IA es más fácil… más que fácil, los resultados son muy interesantes”, agregó. Más que ver a la IA como una competencia o algo que amenazara su labor como creador, Rodo Morfín quedó sorprendido al ver el ritmo en que la herramienta aprendía por medio de instrucciones de las interpretaciones que arrojaba con base en los datos que él mismo le daba, “como una especie de diálogo entre el hombre y la máquina en la que el arte, como terreno común, se diversificaba, crecía y se expandía”.“Tú le estás dando instrucciones a una máquina, la estás alimentando de información y ella te da una respuesta”, explicó Rodo Morfín.A lo que sumó: “Una imagen, si le das ciertas características la IA le da su propia interpretación. Entonces en este ejercicio me gusta mucho jugar con el tema de los rostros. Estos 50 retratos son de gente no conocida, de gente común y corriente, son seres monstruosos, pequeños monstruos. Es un ejercicio muy personal de cómo el ser humano siempre ha intentado usar una máscara y un disfraz para ser visto. Nuestra propia experiencia siempre está maquillada”.Cabe señalar que Rodo Morfín no se ha quedado estancado. Mientras otros artistas que se han especializado en lo digital han visto la llegada de la IA como una complicación, un desafío creciente que gradualmente podría relegar al humano, el tapatío logró llevarla a un terreno de autodescubrimiento, de imaginación constante, una conversación con la máquina que, mediante la creatividad del humano, lleva el arte a nuevos lugares que seguirán abriendo debates en los tiempos por venir.“La IA implica estar viendo, observando qué tanto avanza. A veces da miedo, pero es muy interesante”, finalizó el artista. “Diversilandia” estará expuesta hasta el jueves 15 de mayo, desde las 16:00 horas hasta las 22:00 horas, en Santa Teresita Centro, en la calle Andrés Terán 586. El último día habrá una subasta abierta en la que las piezas de la exhibición estarán disponibles para el público, además de otras obras de Rodo Morfín. CT