Suplementos | Atractivo Hasta el 11 de enero Una fila para caer en el hielo Patinar, o intentar hacerlo, resulta toda una aventura en la pista zapopana Por: EL INFORMADOR 15 de diciembre de 2012 - 20:30 hs Equilibrio. Principiantes y avanzados tienen la misma oportunidad de disfrutar de las pista en el Centro Histórico de Zapopan. / GUADALAJARA, JALISCO (16/DIC/2012).- Ya ni los mandamientos son tan estrictos. No empujarás. No patinarás en sentido contrario. No usarás el celular. No harás cadenitas humanas. No te sentarás en la barda. No soltarás escarcha. No, no y no. El que se forma en esa fila, que más bien parece penitencia, sabe a lo que se atiene; pero qué más da, no todos los días hay una pista de hielo en el centro de Zapopan, y a quienes quieren montarse en dos patines sin pagar un solo peso, no les queda de otra que acatar los congelados mandamientos. Ni Bambi caminaba tan torpemente cuando estaba recién nacido. Los que ya han tenido la fortuna de subir a la pista —150 personas cada 30 minutos— ponen cada pie en el hielo como si un paso en falso los hiciera caer al vacío. ¿Sirve de algo? No, porque tarde o temprano terminan cayendo ante la risa de los que están en la fila y pronto les tocará enfrentar la misma suerte. Los niños hacen bromas. Las parejas patinan —o eso intentan— de la mano. Los menos arriesgados casi ni se despegan de la barda. Los más traviesos violan uno de los mandamientos y empujan al otro. El otro se para como puede y regresa la maldad. Toda una escena navideña en un clima que casi cayendo la noche no obliga a llevar suéter y que está ambientada por canciones hechas especialmente para la ocasión; desde las que canta Luis Miguel hasta las que se pueden bailar con todo y quebradita. Y para que no queden dudas de que aquí es invierno, un par de máquinas expulsa nieve ficticia que cae en la ropa de la gente y desaparece a los tres segundos. Todo es risa y diversión hasta que el hombre del altavoz dicta las indicaciones. Porque si se pensaba que con los mandamientos era suficiente, se está cayendo en un grave error. El hombre es moreno, alto y casi siempre tiene cara de enojado. Casi siempre, porque a veces, cuando no tiene que gritar, hasta baila. Pone el altavoz a unos centímetros de su boca y se vienen las órdenes: niños menores de cuatro años, no entran; niños de cinco años sin la compañía de sus padres —un niño por adulto—, no entran; gente que haya olvidado los calcetines en casa, no entra. El hombre, que también es quien reparte las fichas —una especie de cadenero de antro— suelta el altavoz y, ahora sí, es hora de quitar la cara de enojado. ... Son alrededor de las 20:00 horas y Ana Rosa es la siguiente en pasar. Está acompañada de tres niños de 10 y 11 años. En una clara muestra de que la vida no es justa, otro grupo acaba de pasar y ella no alcanzó ficha. Su consuelo es que será de las primeras en entrar para la siguiente ronda, aunque tendrá que esperar otra media hora que se suma a la hora y media que ya ha estado en la fila. En fin: los niños mandan en épocas navideñas y si así lo quieren, el adulto va y se forma aunque ni siquiera vaya a patinar. Si fuera por esos tres niños, ya se hubieran brincado la barda para acortar los tiempos. Pero el hombre del altavoz no lo habría permitido. No les queda otra que mantenerse de pie, viendo a los que se caen en la pista. Ellos nunca han patinado sobre hielo y por eso insistieron en ir. ¿Les da miedo caerse? La niña dice que sí y los dos niños que no. En algo coinciden todos: total, si se estampan contra el hielo, no pasa de que se soben mientras los de la fila se ríen, para después levantarse y seguir patinando. Quien apenas pondrá su paciencia a prueba es Rosa Blancarte. A las 18:00 horas llegó a formarse junto con su hija Martha. Otra víctima más de los deseos del progenitor. La fila es una serpiente que va desde la entrada del estacionamiento de la plaza, del lado de la avenida Hidalgo, hasta el centro de la explanada de la Plaza de las Américas Juan Pablo II. Su hija se ve emocionada y estará en la fila hasta que se acabe. Al menos tiene la convicción de hacerlo. Martha está emocionada porque nunca ha patinado sobre hielo y la fila parece importarle un carajo. La paciencia y el deseo van de la mano. Si Martha tiene buena suerte, podrá mantenerse más tiempo de pie que los otros niños que tardan más en caer sobre el hielo que en levantarse. ... Hora de terminar. La media hora se derritió como un cubo de hielo. Felices, cansados y probablemente también raspados, los patinadores bajan de la pista. Repiten el mismo ritual: se sientan en una banca o en el suelo, retiran los patines y dejan a la vista dos bolsas de plástico que cubren los calcetines. Llevarlas es otro de los requisitos obligados si se quiere patinar. Otro hombre con altavoz grita: “¡Hay que depositar las bolsas en el bote de basura!”, como si alguien planeara llevárselas a casa como el recuerdo de la fila, los mandamientos y las caídas. Otro grupo entra y la escena se repite. Algunos apenas llegarán a formarse. Otros se habrán quedado apunto de entrar. Los de adentro avanzarán con pasos torpes. El hombre del altavoz volverá a poner mala cara. Los de afuera, los que no hacen fila. Se recargarán en una valla para ver, reírse y, probablemente, desear estar ahí sin la necesidad de formarse. El horario para ingresar a la pista de hielo es de 10:00 a 21:00 horas de lunes a jueves, mientras de viernes a domingo se extiende hasta las 22:00 horas. La pista permanecerá hasta el 11 de enero de 2013. Otras distracciones Si después de hacer fila y cuidar a los niños quiere tomar un respiro, una variedad de restaurantes y bares lo esperan después de cruzar los Arcos de Zapopan, donde incluso se podrá escuchar música en vivo de los más variados géneros, e incluso levantarse a bailar al ritmo de la banda. El Museo de Arte de Zapopan, en el Andador 20 de noviembre, abre sus puertas de martes a domingo de 10:00 a 18:00 horas. En este momento, y hasta el 31 de octubre de 2013, se encuentra la exposición del monero Jis, llamada Obviaremos las narices: descargas moneras con ínfulas retrospectivas”. El precio del boleto es de 13 pesos para el público en general y hay descuento para personas de la tercera edad, estudiantes y maestros. En la misma explanada de la Plaza de las Américas Juan Pablo II, está la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan, uno de los mayores símbolos religiosos de la Zona Metropolitana. Frente a ésta, hay venta de arte y artículos religiosos para quienes gusten de tener este tipo de piezas entre sus pertenencias. Temas Pasaporte Zapopan Navidad 2012 Lee También Inicia la Romería 2025 con misa de Patrocinio frente a Catedral Atención, MiBici cerrará 12 estaciones por la Romería 2025 ¿Cuál es el origen del árbol de Navidad y su significado? ¿Cómo afectan las faltas al trabajo en el pago del aguinaldo? Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones