SÓLO UN SUEÑO

Kate Winslet y Leonardo DiCaprio vuelven a ser pareja cinematográfica tras el éxito de Titanic una década atrás. El resultado es un abrasador melodrama que consigue eclipsar el simple morbo de ver a ambas estrellas juntas otra vez

El director de Belleza Americana y Camino a la perdición vuelve a la carga con Sólo un sueño, película para la que reclutó a su propia esposa, Kate Winslet, así como a su co-estrella de Titanic, Leonardo DiCaprio. De entrada, el simple hecho de reunir a la dupla Kate-Leo parece un acertado golpe de mercadotecnia. Afortunadamente, la película va mucho más allá y entrega un melodrama doméstico que aborda con intensidad la delicada y espinosa batalla de la felicidad conyugal contra los anhelos individuales.
Corren los años cincuenta. April y Frank (Winsley y DiCaprio) integran un joven matrimonio de clase media de la post-guerra que tiene todo lo que cualquiera desearía: dos preciosos hijos, una agradable casa, estabilidad económica. Sin embargo, ambos son infelices, pues para lograr esa “idílica” vida de familia ambos tuvieron que sacrificar sus respectivos sueños y deseos personales. Para solucionar el problema, April le propone a su marido que se deshagan de todo y se muden a París. No sin resistencia, Frank aprueba el plan de su esposa, aunque el camino para concretarlo podría llegar a ser más difícil de lo que piensan.
Nominada a tres premios Oscar y ganadora del Globo de Oro a la Mejor Actriz Protagónica (Winslet), entre muchos otros reconocimientos internacionales.

(Revolutionary Road)
D: Sam Mendes
I: Kate Winslet | Leonardo DiCaprio | Michael Shannon | Ryan Simpkins | Ty Simpkins
Melodrama | 119’ | B-15 | Estados Unidos-Reino Unido, 2008.