Luce ‘cuerpazo’ después de ser madre

GUADALAJARA, JALISCO (03/FEB/2014).- Mathías nació por cesárea, por lo que la joven no pudo hacer mucho ejercicio (sólo algo de yoga y pilates) los primeros tres meses, pese a ello antes de ese tiempo ya había recuperado su figura. El uso de una faja y comer lo más saludable posible son factores que ella considera que influyeron en su peso, además de tener un metabolismo rápido.

Ya han pasado dos años desde que Gabriela se convirtió en madre y ahora su figura es prácticamente la misma que antes del embarazo, salvo una diferencia: hoy pesa dos kilos menos.

La joven de 27 años acepta que la alimentación que tuvo durante y después de su embarazo fue primordial para conservar y cuidar su peso dentro de lo posible.

Rosa Ochoa, especialista en nutrición, advierte que en un embarazo normal o aceptable, las mujeres suben un kilo por mes, lo que significa que aumentan de nueve a 12 kilos, pero si rebasan este número es peligros, ya que el bebé podría ser más grande de lo normal.

Para bajar lo ganado durante el embarazo, añade, lo esencial es llevar una dieta saludable desde el primer mes y después de dar a luz.

A continuación te presentamos algunos consejos básicos para que evitar sufrimientos y remordimientos luego de parir.

No comer por dos

Una frase popular entre las embarazadas es que deben comer “por dos”: una ración para ellas y la otra para inquilino que habita en su vientre; sin embargo, Rosa Ochoa dice que esto es falso, sobre todo en los primeros dos meses, en los que la dieta debe ser la normal.

A partir del tercer mes es cuando se recomienda que aumente el consumo de calorías; del tercero al sexto hay que comer diario 300 calorías adicionales a lo acostumbrado; mientras que del sexto mes en adelante, la cifra debe incrementarse a 400 calorías diarias.

Lo cierto es que siempre están a la orden del día los famosos antojitos, pero hay que hacer un esfuerzo por evitar los chocolates, postres y frappés, y —por supuesto— despedirse completamente del café, las bebidas alcohólicas y el tabaco, ya que esto puede causar preeclampsia o falta de oxígeno en el producto.

No son necesarios los multivitamínicos si llevas una dieta correcta, pero sí es importante alimentarse sanamente y dormir bien, puntualiza la nutrióloga. Si el bebé es planeado, es bueno tomar ácido fólico unos seis meses antes de la gestación, de no ser así, sólo es recomendado en los primeros tres meses, ya que evita la formación del tubo neural y el retraso mental.

Mantente activa

Siempre será más rápida la recuperación cuando se tiene a un bebé por parto natural. Sin embargo, los días que deben pasar para iniciar con la actividad física dependerán de la cantidad de ejercicio que hiciste durante el embarazo.

Si te mantuviste activa y tuviste un parto natural, puedes realizar ejercicios livianos unos días después de dar a luz, tales como caminar, hacer flexiones de brazos o de pecho modificadas y practicar estiramientos. Una semana después podrás hacer caminatas a un ritmo de lento a moderado, al menos tres días de la semana.

Si durante el embarazo evitabas hacer movimiento, tendrás que empezar poco a poco y consultar a tu médico antes de iniciar con ejercicios.

Las mujeres que fueron sometidas a una cesárea, tendrán que esperar más para comenzar a hacer ejercicio, esto es, de seis a ocho semanas; pero ojo, eso no significa que te queden en cama hasta recuperarte, podrías caminar en casa para empezar a agarrar ritmo y volver con mayor facilidad a tu vida cotidiana.

La faja es tu amiga

Para empezar a moldear tu figura es indispensable que uses una faja, puede ser de algodón o manta, pero nunca de poliéster.

Es recomendable lactar ya que esto te ayudará también a perder peso, además de ser benéfico para el bebé, porque la leche materna tiene anticuerpos y ayuda al sistema inmunológico. Durante esta etapa tampoco debes ingerir bebidas alcohólicas ni fumar, y es importante consultar al médico si vas a consumir medicamentos.

El té verde sirve para eliminar la grasa del vientre, pero lo más importante es que después del embarazo vuelvas a la dieta que tenías antes, sin aumentar las calorías. Es indispensable que trates de comer cinco veces al día y tomes mucha agua, ya que esto acelera tu metabolismo en un 30 por ciento.

Ochoa señala que muchas veces las mujeres no pueden volver a su peso porque la ansiedad las hace comer de más. Dormir de siete a ocho horas es el arma perfecta para evitar el estrés y el mal humor.