Suplementos | La cultura milenaria de los mayas sigue más viva que nunca, gracias a su arte Chetumal, allá en el lejano sur La cultura milenaria de los mayas sigue más viva que nunca, gracias a su legado artístico Por: EL INFORMADOR 7 de diciembre de 2014 - 00:15 hs Los murales de Bonampak aparecen delicadamente expuestos en el Museo de la Cultura Maya en Chetumal. EL INFORMADOR / P. Fernández GUADALAJARA, JALISCO (07/DIC/2014).- Allá muy apartada y casi olvidada en lo más recóndito del Sur, y muy al oriente de nuestra república mexicana, aparece entre lagunas y pantanos la acogedora y hospitalaria Chetumal, separada por el Río Hondo de los dominios ingleses de Belice. “Chaak-temal” (lugar de los árboles rojos) o bien “Chaac-te-emal” (lugar donde bajan las lluvias) —siguiendo la dualidad del pensamiento maya— es una ciudad moderna con aire caribeño, que se ha forjado entre las amargas peripecias de su historia. Primero fue hostigada por los españoles. Más tarde, en los siglos XVII y XVIII sufrió el despiadado asedio de los piratas. Y posteriormente la terrible “Guerra de Castas” en la que los hacendados —principalmente extranjeros— despojaban de sus tierras a los mayas, sus legítimos propietarios desde los principios de la historia. Tanto Chetumal como Bacalar fueron asediadas por corsarios, bucaneros, piratas y filibusteros, tomándolas además como escondite para asaltar a las naves cargadas de metales preciosos -que ellos mismos a su vez habían saqueado- y del apreciadísimo “Palo de Tinte” (Haematoxilum campechianum) de las selvas regionales, que se utilizaba para teñir de azul y púrpura los textiles de ese entonces. Un imponente fuerte tuvo que ser construido frente a la bahía, para defenderse de los piratas que las asediaban: Francis Drake, el Lorencillo, el Olonés, Henry Morgan, Wallace entre otros pillos de nefasta memoria, quienes bajo el famoso “Derecho de Corso” y amparados por los gobiernos de Inglaterra, Francia y Holanda, asaltaban a cuanta embarcación podían, compartiendo con ellos sus botines. También se dice que en la antigua Chactemál, fue el lugar a donde arribaron los dos sobrevivientes del naufragio de la expedición de Pedro de Valdivia: Gonzalo Guerrero y Jerónimo de Aguilar, quienes en calidad de esclavos fueron tomados prisioneros por el cacique maya Nachán Can. Gonzalo, inteligente y astuto, comprendiendo el singular espíritu del pueblo a donde había llegado, asimiló su cultura y sus tradiciones; y habiendo tomando por esposa a Sazil Há —hija de quien lo había apresado— llegó a ser nombrado “nacom” (jefe de guerreros), formando además, orgullosamente, la primer familia maya-española, a quien defendió y amó intensamente, dando incluso su vida luchando contra de los crímenes y desmanes de sus mismos paisanos conquistadores. Por esto es considerado como el digno padre del mestizaje en nuestras tierras. Chetumal había sido una tranquila ciudad caribeña con casas de madera de vistosos colores, hasta que en el año de 1955 el huracán “Janeth” vino a destruir casi por completo la población, cambiando un poco aquel rostro colorido, fresco y original. Sin embargo hora, su gran malecón sobre la bahía, sus bien cuidados jardines y su extraordinario Museo de la Cultura Maya, han hecho que vuelva a ser una tranquila y moderna ciudad que vale la pena disfrutar. Digna es también de admirar la altiva, orgullosa y controvertida mega escultura de Sebastián, que en medio de la bahía se eleva festejando el mestizaje iniciado en estas tierras. El monumento es genial, ni duda cabe, y las infames políticas que lo tienen en suspenso son fatales. Ojala que llegue a feliz término: vale la pena. Caminando un buen trecho por el malecón, se puede llegar a Oxtankáh, el interesante sitio arqueológico donde el sincretismo de sus construcciones nos muestra claramente a las dos culturas que nos precedieron. Edificaciones piramidales se fusionan con los arcos españoles —desconocidos por los mayas de ese entonces— en apacible armonía formando un interesante y sui géneris conjunto arquitectónico. Chetumal es otro más de los bellos rincones de nuestro México, por el que vale la pena darse una agradable descolgada muy sureña. Temas Cultura Maya Quintana Roo Pasaporte De viajes y aventuras Lee También Alcalde de Tulum anuncia acceso libre a playas, pero sin alimentos ni bebidas Agencias de viaje en Jalisco ofrecen descuentos para adultos mayores con Inapam OFJ prepara su tercera temporada llena de sorpresas y alma jalisciense Estas son las flores que debes colocar en la ofrenda de Día de Muertos Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones