Deuda polémica

En cumplimiento de la facultad que le confiere la Constitución del Estado, el Congreso local debe aprobar el Presupuesto de Egresos para Jalisco, y desde hace semanas se ha venido discutiendo el que deberá aplicarse en 2009, en un ejercicio que no ha estado exento de confrontaciones entre las distintas fracciones parlamentarias, principalmente las dos más grandes, que son las de los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI).

Desde que fue presentada la propuesta inicial por parte del Ejecutivo, los diputados priistas pusieron la mira en la pretensión de contratar un endeudamiento hasta por cinco mil 500 millones de pesos, para complementar los ingresos propios y poder atender todos los requerimientos que tendrá la Entidad el próximo año, ante las dificultades económicas que se ciernen sobre los ámbitos local, nacional e internacional.

A juicio de los legisladores del tricolor, en una postura que mantienen incluso tras la aprobación del endeudamiento durante la sesión del pleno del Congreso la tarde de ayer, no se justifica la adquisición de deuda porque el Gobierno del Estado no ha demostrado ser un ejecutor eficaz de los programas de inversión, de tal suerte que no ha ejercido cabalmente lo que la Legislatura le autorizó para este año, que está por concluir. Agregan que se dará un salto innecesario que comprometerá recursos que a fin de cuentas pagarán todos los jaliscienses.

Del lado del PAN, a diferencia de lo que ocurrió en 2007, cuando los propios diputados de este partido cuestionaron distintas propuestas del gobernador y llevaron hasta el límite la aprobación de ingresos y egresos, ahora han hecho causa común con el Ejecutivo y le han brindado su respaldo prácticamente incondicional.
El Gobierno panista asegura que es indispensable contar con esos recursos porque sólo con ese complemento se podrá hacer un trabajo consistente en materia de infraestructura en todas las regiones del Estado. Al final, a los blanquiazules se sumaron los otros legisladores de oposición para aprobar el endeudamiento, y los priistas se mantuvieron en su posición, votando en contra.

Lo que sigue es ponerle lupa a la revisión de cómo se aplican los recursos que tendrá el Gobierno para 2009, año electoral.