Mujer Segura

En el último año, en varias ocasiones he analizado diferentes aspectos de la violencia que a diario enfrentan mujeres mexicanas. Por ejemplo, les comenté en una de mis columnas que en nuestro país, 30 mujeres pierden la vida cada día por violencia intrafamiliar, 25% de las mujeres mayores de 15 años han sido víctimas de abuso sexual, 26.5 millones de mujeres mayores de 15 años han sido víctimas de una agresión por lo menos una vez en su vida.

Otro dato difícil de entender y que plasmé en este espacio: uno de los datos más alarmantes que proporciona el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), señala que cinco de cada 10 mujeres viven situaciones de violencia en sus noviazgos.

Ante esta realidad, y por ser la semana en que se conmemora el “Día Internacional de la Mujer”, les vuelvo a presentar mi decálogo de “Mujer Segura”:

1.- Una “mujer segura” tiene seguridad en sí misma: no le importan los estereotipos físicos o emocionales del género, se respeta como es, asume sus cualidades y reconoce sus defectos, pero jamás se siente inferior.

2.- Se responsabiliza de su salud: invierte en la prevención de enfermedades, y no se deja llevar por tendencias de la moda que afectan su salud.

3.- Busca educarse: sabe que mientras más lo haga, mejor podrá competir en el ámbito laboral, el conocimiento le dará una herramienta para sus relaciones profesionales y personales.

4.- Es autónoma y busca independizarse: aprecia su capacidad para no depender de sus padres, hermanos, amigos o de la propia pareja.

5.- Se responsabiliza por sus finanzas: aun estando en una relación de pareja, una mujer segura reconoce que la única garantía de su bienestar económico y de sus hijos, depende en gran parte de su capacidad para poder mantener a su familia.

6.- Busca relaciones libres de violencia: nunca permitirá que su pareja le levante la mano o la minimice, una mujer segura siempre defenderá sus pensamientos e ideas basadas en la igualdad y la equidad y nunca justificará el machismo.

7.- Se responsabiliza por su propia seguridad y la de su familia. Se preocupa por conocer los peligros y amenazas y toma acciones preventivas.

8.- Educa a sus hijos en ambientes libres de violencia y les enseña el respeto a los demás: establece relaciones de confianza y diálogo con sus hijos para llegar siempre al entendimiento y no al castigo físico.

9.- Promueve la igualdad de condiciones y de oportunidades: rompe con los tabúes machistas, no permite que exista sexismo o se minimice a la mujer al interior de su hogar y su lugar de trabajo.

10.- Es una ciudadana responsable: participa en la mejora de su comunidad, conoce a sus vecinos, así como los peligros y las posibles soluciones del lugar en donde vive. Participa y hace que su voz se escuche. No teme ejercer su liderazgo.