Exitosa Conferencia sobre No Proliferación de Armas Nucleares: SRE

MÉXICO (31/MAY/2010).- La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) calificó como un gran éxito para la comunidad internacional y el multilateralismo el documento final de la VIII Conferencia de Examen del Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP).

La cancillería refrendó el carácter de México de firme promotor del desarme y la no proliferación, por lo que indicó que seguirá trabajando en la total y completa eliminación de armas nucleares por considerar que contravienen el derecho internacional.

Destacó que dicho documento, adoptado por la comunidad internacional el 28 de mayo pasado cuando concluyó la conferencia, refuerza el ambiente positivo en materia de desarme nuclear y no proliferación.

México participó activamente a lo largo de la VIII Conferencia de Examen, en su calidad de vicepresidente, y desempeñó un papel destacado en el grupo pequeño de Estados que negoció el documento final, expuso en un comunicado.

'Las propuestas de nuestro país relativas al desarme nuclear y a las zonas libres de armas nucleares quedaron reflejadas en el documento adoptado', sostuvo.

Detalló que el documento final se refiere a los tres pilares del Tratado (desarme, no proliferación y usos pacíficos de la energía nuclear) y consta de dos grandes apartados: un examen de la aplicación del Tratado; y conclusiones y recomendaciones para acciones de seguimiento.

La Conferencia de Examen reafirmó el papel esencial del Organismo Internacional de Energía Atómica en la promoción del uso pacífico de la energía nuclear, la elaboración de directrices de seguridad, la promoción de cooperación técnica y la no proliferación de armas nucleares a través de su sistema de salvaguardias, refirió.

También destacó la importancia del Protocolo Adicional para garantizar la naturaleza pacífica de los programas nucleares y la necesidad de que el Organismo Internacional de Energía Atómica cuente con los recursos necesarios para continuar con su mandato.

De manera adicional, sostuvo, la conferencia reconoció el derecho inalienable de los Estados al uso pacífico de la energía nuclear e hizo un llamado a los Estados para que reduzcan la existencia de uranio de alto enriquecimiento.

Asimismo, para que procuren, como medida de seguridad, cambiar el combustible de sus reactores de investigación bajo su jurisdicción, por uranio de bajo enriquecimiento, entre otras medidas.