Procuraduría de Justicia investiga ejecución en Zapopan

ZAPOPAN, JALISCO.- El caso del individuo que la noche del pasado jueves fuera baleado frente a sus hijas en la colonia Mariano Otero, de Zapopan; ya ha sido abordado por la Procuraduría de Justicia, e incluso ya han salido varias líneas de investigación.

Se trata de Enrique Bañuelos Flores, de 36 años, quien fue asesinado a tiros frente a la finca asignada con el número 1181 de la calle Turquesa, en la colonia y municipio de referencia.

El infortunado sujeto viajaba en compañía de sus dos hijas —ambas menores de edad—a bordo de una camioneta Jeep, Grand Cherokee, color tinto, modelo 2001, placas JGW-2922; con el propósito de cobrarle dinero a un abogado.

Testigos presenciales refirieron que, al ir circulando, una camioneta blanca se le emparejó al vehículo en que viajaba, y sin mediar palabra alguna iniciaron las detonaciones en su contra.

Las dos menores, tras escuchar los tiros, actuaron de manera instintiva y se resguardaron en la parte inferior del vehículo, con lo cual se evitó que resultaran heridas; aunque a decir de las personas que presenciaron la acción, los balazos claramente iban dirigidos a Bañuelos Flores.

Tras el hecho, personal de la PGJE perteneciente al área de Homicidios Intencionales inició las indagatorias, e incluso mencionó que en el lugar fueron asegurados tres casquillos calibre nueve milímetros.

Tras los exámenes forenses, el médico señaló que el cuerpo presentaba siete heridas por arma de fuego, distribuidas en la región escapular derecha, hemitórax y en la cara interna de la pierna izquierda.

Asimismo, el legista indicó que los exámenes post mortem arrojaron como resultado que las causas exactas de su deceso fueron las citadas heridas, que penetraron en su tórax y abdomen.

Fue Claudia Gabriela Bañuelos Flores, identificada como la hermana del finado, quien se presentó a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), para identificar a su consanguíneo.

Ella indicó que su familiar tenía su residencia en la calle Loma Cuyutlán, de la colonia Loma Dorada, en Tonalá.

Los elementos investigadores ya han dado inicio con las indagatorias que lleven a esclarecer este hecho; el cual —según versiones extraoficiales— tiene tintes de ejecución.

EL INFORMADOR / Isaack de Loza