Internacional | Hillary Clinton está dispuesta a la guerra. Emprende Hillary nueva cruzada para ganar la elección Con la mayoría de los delegados bajo el brazo, Obama declaraba ayer desde Iowa una victoria que le ha colocado al borde de la candidatura presidencial Por: SUN 21 de mayo de 2008 - 07:59 hs WASHINGTON.- Hillary Clinton está dispuesta a la guerra. Su apuesta por cambiar las reglas del juego en plena contienda, para arrebatar la nominación presidencial que parece destinada a Barack Obama, le han granjeado las enemistades de quienes podrían reconvenirla en el curso de los próximos días para conjurar la posibilidad de una "guerra civil" en la convención demócrata de agosto próximo que facilite el camino del republicano, John McCain, a la Casa Blanca. "Las cosas podrían ponerse realmente feas", vaticinó el veterano analista, Howard Fiineman, al adelantar que entre aquellos que podrían llamar a capítulo a Hillary, "más temprano que tarde", se encuentra la influyente líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representanets, Nancy Pelosi. Con la mayoría de los delegados bajo el brazo, Obama declaraba ayer desde Iowa una victoria que le ha colocado "al borde de la candidatura presidencial". Sin embargo, su casi segura nominación podría convertirse en una penosa novela por entregas, en caso de que Clinton persista en su intención de apostar por un cambio de reglas y conseguir que, el voto popular y no el número de delegados que son asignados de forma proporcional, se convierta en el criterio decisivo para declarar al ganador de la contienda. "Hillary quiere agotar el proceso porque, una vez que éste concluya, tendrá la posibilidad de demostrar que tiene a su favor el voto popular", aseguró María Cardona, asesora de Clinton, en alusión a un recuento que incluye el voto recabado por Hillary en los estados de Florida y Michigan, dos estados que fueron extirpados del proceso por haber desafiado el calendario de primarias fijado por el partido demócrata. La exigencia de Clinton, que será estudiada por el comité de reglas del partido el próximo 31 de mayo en Florida, podría transformarse en una guerra de guerrillas entre los que siguen siendo leales a Clinton y los que consideran temeraria su actitud de querer cambiar las reglas a mitad del camino, después de haberse comprometido a respetarlas desde el mes de agosto del año pasado, cuando suscribió con todos los candidatos un compromiso de acuerdo para no hacer campaña en Michigan Florida. Contra los empeños de Hillary Clinton opera, sin embargo, la lógica de los apoyos políticos que emanan del voto popular y que se reflejan no sólo en el número de delegados asignados, sino en el porcentaje de superdelegados -altos cargos del partido y representantes--, que podrían convertirse en los árbitros de un dramático desenlace. Según las cifras compulsadas por distintos medios como CNN, la agencia AP y la NBC, el número de superdelegados que aún no han hecho público su respaldo -y que decidirán el final de la contienda--, ascienden en estos momentos a 212. El resto, casi 600, se han decantado a favor de uno u otro candidato en una relación de 305 para Obama y 277 para Clinton. De esos 212, un total de 115 representan a estados donde ha ganado Obama, mientras que 86 le deben su lealtad a estados conquistados por Clinton. "Es muy difícil que un superdelegado contravenga la voluntad del voto popular, por lo cual la causa de Hillary entre este grupo de líderes y representantes, parece perdida", opinó el analista Tim Rusell. Por eso, cuando Hillary insista en subir el listón de la contienda, apostando por un cambio de reglas y vendiendo el factor del voto popular (que incluya a Florida y Michigan) como criterio decisivo de la nominación, un considerable grupo de superdelegados podrían un paso al frente para garantizar, en apurado cierre de filas, los 2 mil 25 delegados que convertirían a Obama en el nominado de facto del partido demócrata y dejarían a Clinton a merced del escarnio y la humillación. "Y sospecho que eso ocurrirá no más allá de la segunda semana de junio, cuando Hillary podría al final darse cuenta de que su lucha contra la nominación de Obama, es una causa perdida ", sentenció Fineman. Temas Norte América Elecciones EU Lee También Acusan por crimen de mexicano a planificador del atentado a senador de Colombia América Latina gasta tres veces más en deuda que en salud y educación Gol de Rodolfo Pizarro y lesión de Fidalgo llenan de MEMES inicio de la Liga MX El América la pasa mal en Ciudad Juárez Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones