Van Buuren calienta la noche en la Explanada del Omnilife

GUADALAJARA, JALISCO (06/NOV/2011).- Con una ambiciosa propuesta visual y sonora, Armin Van Buuren volvió a Guadalajara para calentar el ambiente electrónico y de paso dar gusto a los poco más de ocho mil seguidores que se dieron cita en una gélida noche que elevó su temperatura gracias al sonido del célebre artista.

El DJ volvió a Guadalajara luego de casi tres años de ausencia, tiempo en el que incrementó su prestigio como uno de los artistas más destacados en el género de la electrónica house, aunque no fue solamente su set sonoro lo que sorprendió a los presentes en la explanada del Estadio Omnilife, donde se celebró el concierto.

Y es que si bien el ofrecer un show al aire libre tiene como inconveniente que los asistentes se enfrenten a las inclemencias del clima, también es cierto que los organizadores supieron sacar provecho escénico, al lanzar fuegos artificiales y balones, lo que ayudó a envolver el concierto en un ambiente festivo.

El aritsta optó por incluir como elemento principal las piezas de su disco Mirage the remixes, con temas bien conocidos entre el público por su exposición en la radio como Not givin up on love, y mezclas especiales de artistas como The Killers, para así rendodear una noche que si tuvo un elemento que pudiera considerarse en contra fue que se presentó en el escenario hasta las 01:00 horas del sábado, una hora después de la pactada.

El escenario que desplegó Armin se apoyó fuertemente, como es costumbre en el artista, en un amplio juego de pantallas que desplegaron animaciones y mensajes para dar fuerza a cada uno de los temas, además de envolver al público en un ambiente que sin perder su esencia electrónica por momentos coqueteó con fuerza con el pop.

Bien acompañado

Previo a la aparición de Van Buuren fueron varios los DJ’s que se encargaron de calentar los ánimos del público, que comenzó a llegar desde las 19:00 horas, aunque la música no sonaría sino hasta una hora más tarde.

Los primeros en salir fueron Miguel Rechy (de México y bien conocido en Guadalajara donde trabaja como locutor en una estación de pop), David Thomas (de Estados Unidos) y Joe Parra (de México).

Pero el “telonero” que se llevó las palmas fue Jochen Miller, de Holanda, y quien llega a esta gira considerado como un “protegido” de Armin Van Buuren, ya que lo ha llevado por diversos escenarios del mundo para que se vaya fogueando.

Miller dejó claro que es capaz de ofrecer un espectáculo sólido, como lo demostró durante las casi dos horas que estuvo en el escenario al mando y donde cosechó aplausos y gritos de apoyo por parte del respetable.

POR CIERTO
Una brillante producción

Lo mejor

La seguridad previa al evento. Se contaron con varios puntos de revisión y a diferencia de otros conciertos el equipo que se encargó de revisar a los asistentes lo hizo en general con una actitud amable. También hubo presencia de policía y bomberos, además de un operativo vial para desahogar rápidamente las arterias de acceso y salida del Omnilife.

La producción brilló por el ambicioso montaje de Van Buuren, quien fue el que desplegó a su máximo el uso de pantallas y pirotecnia. El artista se presentó además con una buena actitud, saltando y pidiendo aplausos para hacer un show más dinámico.

Lo cuestionable

Nuevamente hubo una presencia descarada por parte de los revendedores, quienes a sus anchas ofertaron boletos para todas las zonas, apostándose de forma visible en cada uno de los accesos al evento sin que la presencia de las autoridades les causara la más mínima molestia.